C.E.I.P. LOS ALMENDROS (SECADERO – MÁLAGA) TAREA Nº3 El objetivo de esta tarea es el de reflexionar sobre una lectura de Fernández Bravo, intentando sacar conclusiones que sean válidas para tu práctica docente en el aula. DESCRIPCIÓN: Lee detenidamente el artículo. Céntrate en la idea o ideas con las que estés de acuerdo y que pondrías en práctica en tu aula. Describe tus planes para ello. LECTURA: EL MATERIAL, LA PRÁCTICA Y EL MÉTODO La mayor parte de las maestras y maestros experimentan una cierta aprensión al lanzarse a la práctica de un método tan diferente de todo lo que han conocido hasta ahora. Son comprensibles estos temores, pues no basta estar persuadido de que el método es bueno y comprar el material, para que la enseñanza de las Matemáticas mejore inmediatamente. Las regletas de Cuisenaire no son un procedimiento al que baste plegarse pasivamente: Exige una conversión total de la actitud docente, y el que quiera aventurarse en él ya no puede seguir siendo la misma persona que hasta el momento de decidirse. También puede ocurrir que se posean las regletas y se continúe enseñando de la misma manera que antes pues “el método” no reside ni en el material (por indispensable que éste sea) ni en los textos, del mismo modo que la música no reside en el instrumento ni en la partitura: hay que recrearla por completo, y para esto hace falta un virtuoso. Pero no se convierte uno en virtuoso de la noche a la mañana; para llegar a serlo hay que practicar. Los resultados pueden ser muy diferentes de una clase a otra, según el grado de preparación de las maestras y maestros. Confío muy poco en el éxito de aquellos a quienes se impone “el método” contra su voluntad. Pero a todos los educadores de buena voluntad que me dicen: “Prefiero esperar a dominar el método antes de lanzarme”, les contesto: “Las regletas de Cuisenaire no es algo que haya que aprender de memoria para luego repetirlo: sólo lo conoceréis practicándolo, y sólo lo dominaréis a fuerza de años de experiencia”. Es posible introducir las regletas en un grado cualquiera y en cualquier momento del curso escolar, porque no se trata de enseñar las regletas de Cuisenaries, sino de enseñar Matemáticas, no siendo las regletas más que un “modelo matemático” que, por su excelencia, puede facilitar grandemente su aprendizaje. Vale más dejar que una maestra o maestro de una clase adelantada y que no haya recibido más que una leve iniciación intente la experiencia, que imponerlo a maestros de la clase más elemental insuficientemente o nada preparados. Es importante que las maestras y maestros principiantes no se queden aislados. Si en una misma escuela varios profesores emprenden la aventura Cuisenaire, es importante que trabajen en estrecha colaboración y se ayuden mutuamente. Es importante que los que viven en el mismo barrio o en la misma región se reúnan periódicamente; que visiten a otros colegas que ya tengan alguna experiencia. Es importante que quien se lance a practicar con las regletas rompa con los hábitos dogmáticos para adoptar una actitud de investigación, y la investigación se estimula con los numerosos contactos... José Antonio Fernández Bravo NOMBRE: Mª Ángeles Pérez Rivera ¿QUÉ IDEAS COMPARTES Y CUALES PONDRÍAS EN PRÁCTICA EN TU AULA?: “los maestros experimentamos cierta aprensión a probar nuevos métodos” porque igual el resultado de la práctica no es inmediato y tenemos que ver la puesta en práctica y los resultado para convencernos, nos apegamos a lo seguro y tradicional y este método es realmente diferente a lo conocido. En realidad cuando lo ves en práctica en el aula y ves al alumnado cómo lo integra y hace los cálculos te sorprendes realmente, no esperas que sea de este modo tan eficaz, es verlo en acción para comprobar que realmente funciona. “Exige una conversión total de la actitud docente” hay que meterse de lleno en la práctica creyendo en ella y ésta práctica retroalimenta la conversión al método cuando observas cómo realmente funciona. “Es importante que los maestros principiantes no se queden aislados” ya que desde las comunidades de aprendizaje y el intercambio se nutre la experiencia y se aprende también de este modo conociendo la experiencia de otros colegas, que tengan las mismas inquietudes que una misma. DESCRIBE TUS PLANES PARA ELLO: mediante la práctica en el aula con el alumnado del método, seguir la formación en cursos próximos, participar en grupos de trabajo.