ILUSIÓN Con motivo de la pronta llegada de la Navidad decidí trabajar la emoción de la ilusión, ya que es la emoción que se palpa en los niños cuando va llegando Diciembre. En lugar de enfocar la actividad exclusivamente en la Navidad, quise despertarles esa emoción en otro aspecto ya que tengo alumnos que no celebran la Navidad en sus casas por motivos religiosos. Aprovechando la añoranza que sienten aún por su seño de Infantil, les propuse que podíamos hacerle un buen regalo a su seño Vero, que podíamos hacerle un cuento en la que ella fuese la protagonista y que podíamos regalárselo. Así la seño vería cuanto están aprendiendo. Se pondría muy contenta y le haría muchísima ilusión. ¡La ilusión y el entusiasmo se apoderó de la clase! ¡Manos a la obra! Lo más complicado era elegir sobre qué íbamos a escribir el cuento a la seño Vero. Aproveché una lluvia de ideas que habíamos hecho dos semanas atrás para una actividad que hicimos a nivel de Centro para la celebración del Día contra la Violencia de Género. Esta lluvia de ideas era una lista de mensajes positivos y de cariño hacia los demás que podemos hacer. A esta lista le añadimos los posibles personajes de nuestra historia y un título. Los personajes elegidos fueron Topito Terremoto, que es un personaje de un cuento que tenemos en la biblioteca de aula titulado “Topito Terremoto”, y la seño Vero, por supuesto. El título elegido para la historia fue “Te quiero mucho seño Vero”. Ahora, tenemos que redactarlo. Les di a cada equipo de clase una hoja pautada para que rellenaran con tres partes. La primera parte para que presentaran a los personajes y dijeran donde estaban; después, debían plantear el nudo, el problema, lo que les pasó en ese sitio y, finalmente, como lo resolvieron. Esta ficha la rellenaron por equipos haciendo un “folio giratorio”. Después, cada portavoz de cada equipo leyó cada una de las partes y se votó lo que más nos gustó. De esta forma, hicimos una mezcla de las aportaciones de cada equipo y construimos la historia final. Por último, cada alumno y alumna hizo una dibujo alusivo a la historia. Esta la colocamos en el centro de una cartulina grande y los dibujos se colocaron alrededor. Como son 25 alumnos/as, hubo de coger un par de cartulinas más para plasmar todos los dibujos. Una vez que todo estuvo montado, nos fuimos a la clase de la seño Vero ¡y le dimos la sorpresa! Lo mejor de todo fue la cara de ilusión de mis alumnos de camino a la clase de su antigua seño y sus caritas cuando la seño Vero se emocionó con el regalo. ¡Estas cosas son las que hacen grandes esta profesión! Para cerrar el trabajo de esta emoción realizamos las actividades propuestas para la explotación de la imagen del emocionario referente a la ilusión. También, como colofón escribimos nuestra propia definición de ilusión en “nuestro emocionario”. Por motivos de privacidad no puedo insertar las fotos donde se vea la cara de los menores. Aunque es lo más significativo de la actividad, no puedo mostrar sus caras.