La conciencia fonológica favorece la adquisición de la lectoescritura. Su práctica en clase no sólo puede ayudar a prevenir problemas en etapas futuras, sino que también permite saber de forma temprana que alumnos tienen mayor riesgo de tener un trastorno de aprendizaje que afecte a la lectura y la escritura.
Esta práctica se consigue mediante ejercicios y juegos sobre la secuencia de sonidos que forman las palabras, realizando diferentes tareas como:
¿ Jugar con rimas.
¿ Contar sílabas o fonemas
¿ Separar y aislar sílabas o fonemas.
¿ Saber la posición de los fonemas
¿ Distinguir cuales son iguales y cuales no.
¿ Añadir sílabas o fonemas.
¿ Omitir sílabas y fonemas
ACTIVIDADES
Uso de soportes visuales (imagen, gesto fonético, palmadas) Trabajo con el apoyo de la grafía de los sonidos o sílabas a analizar.
Actividades de segmentación de sílabas.
Actividades de segmentación de fonemas.
Actividades de segmentación léxica.
Realizar cruces, poner gomets, según nº sílabas que contenga la palabra.
Unir/asociar imágenes con estructuras silábicas igual.
Clasificar imágenes según estructura silábica.
Identificar cuantas sílabas tiene la palabra palmeada.
Unir imágenes de palabras que contiene la estructura silábica dada.
Señalar imágenes que no se corresponden con la estructura silábica dada.
Es sumamente interesante conocer estrategias centradas en la estimulación de la conciencia fonológica y el uso de actividades dirigidas a aumentar la habilidad de los niños para la manipulación de las sílabas y los sonidos de las palabras, lo que finalmente contribuye al éxito del aprendizaje de la lectura, proporcionando así una base para un adecuado rendimiento escolar.