MEMORIA DEL PROYECTO FORMACIÓN 2016-2017

¿LA EVALUACIÓN COMO MOTOR DE CAMBIO METODOLÓGICO¿

IES José María Morón y Barrientos

Coordinadora: Mª Cinta Fernández Caricol

1. GRADO DE CONSECUCIÓN DE LOS OBJETIVOS

El proyecto de formación comenzó con el respaldo de la mayoría del claustro, 14 profesores/as se inscribieron en el mismo de un total de 18. De los participantes sólo el 50% han continuado con la formación, si bien, hay que señalar que de los que han continuado han finalizado el 100% del proyecto todos salvo uno que por diversas circunstancias no ha podido finalizar todas las tareas.

2. LOGROS MÁS SIGNIFICATIVOS EN EL CENTRO TRAS LA TRANSFERENCIA DE LO APRENDIDO

Lo más relevante a destacar tras la realización de este proyecto de formación es que el profesorado implicado se ha adentrado en una estrategia metodológica que no conocía (en la mayoría de los casos), ha realizado una propuesta y ha podido comprobar que es posible y real y que además facilita, promueve un aprendizaje realmente significativo.

Creo que el superar la adherencia existente al libro de texto como única herramienta de aprendizaje y desarrollar una evaluación alejada del estándar, asignación porcentajes a los distintos instrumentos de evaluación, supone un primer paso en un largo camino de transformación pedagógica.

 

3. LOGROS MÁS SIGNIFICATIVOS EN CADA AULA

Como ya he comentado el profesorado implicado se ha adentrado en una nueva forma de trabajar, algunos de ellos/as han puesto en marcha el proyecto diseñado y otros esperan desarrollarlo de cara al curso próximo.

La evaluación a través de rúbricas, se ha generalizado y puesto en marcha en casi todas las materias y aunque aun prima una evaluación basada en porcentajes asignados a los instrumentos, se ha tomado conciencia de que es un planteamiento que hay que abandonar y llevar a cabo una evaluación realmente formativa que además facilita el Trabajo por Competencias Clave. 

 

4. PRODUCTOS Y EVIDENCIAS DE APRENDIZAJE GENERADAS

Creo que lo más significativo es que se han elaborado proyectos viables que pueden desarrollarse en las aulas y estrategias de evaluación acordes a esa forma de trabajo y coherentes con la normativa actual, que marca esta senda de trabajo pedagógico para el futuro, dentro de un marco de Escuela Inclusiva.

 

5. DIFICULTADES ENCONTRADAS

 

Este curso (2016/2017) ha estado muy marcado por los cambios legislativos y la necesidad de abordar en los centros educativos, modificaciones en los Proyectos Educativos. En este sentido, la adecuación de los proyectos curriculares de cada una de las materias (concreciones), con una metodología, aun poco clara, por parte de la administración, ha supuesto un sobreesfuerzo y una carga laboral para el Claustro. A esto, se le suma, la energía y trabajo añadido que supone poner en marcha un Ciclo Formativo ¿ FPB Cocina y Restauración- que culmina por primera vez durante este curso, desarrollando el alumnado de 2º FPB las prácticas en empresas. Todo esto ha supuesto para las profesoras de Cocina y restauración, Equipo Directivo y Orientadora una gran dedicación que implica que algunas personas se hayan sentido desbordadas y no hayan podido desarrollar el proyecto, pese a su interés inicial.

 

Además de lo señalado, y, a título personal, creo que existe también, una tendencia en el profesorado a entender la formación desde un punto de vista egocéntrico y pasivo muy alejado de la visión global que se debería tener, ¿Formación para el desarrollo de un proyecto pedagógico particular en tu centro. Visión que se ve reforzada por la gran movilidad existente en los claustros que hace, a veces, imposible, desarrollar propuestas pedagógicas que perduren en el tiempo. 

 

6. OPORTUNIDADES DE MEJORA

 

El proyecto nos ha abierto una puerta hacia una metodología inclusiva que debemos aprovechar de cara al futuro. Creo que debemos realizar una autocrítica y reflexionar sobre la práctica, para a partir de aquí, proyectar otras maneras de hacer y profundizar en ellas. El ABP es un ejemplo de este tipo de metodologías.