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GRADO DE CONSECUCIÓN DE LOS OBJETIVOS.
Especificamos los objetivos previstos y explicamos brevemente el grado de consecución de cada uno de ellos.
Incorporar la metodología del Aprendizaje Servicio con el fin de integrar la cooperación social como eje transversal en el desarrollo del currículo.
Este objetivo se ha cumplido con creces. Tal como describimos en el proyecto de este curso, nos propusimos poner en marcha un proyecto de aprendizaje-servicio por nivel y así hemos hecho. De los seis proyectos puestos en marcha, tres han superado nuestras expectativas. Dos de ellos, el desarrollado en el nivel 2ºESO ¿Somos lo que comemos¿, y el desarrollado en 2º Bachillerato, ¿ ¿Qué fue del Sahara?¿, han trascendido el espacio de nuestro centro para salir a nuestro entorno cercano y ofrecer un servicio a la localidad. El que se desarrolló en 1º y 3º ESO ha cumplido su servicio dentro de nuestra comunidad y el previsto para 4º y 1º de bachillerato queda pendiente de mejorar y completar el curso próximo, pero en ambos se ha avanzado bastante.
Lo más importante ha sido que, efectivamente, esta metodología se ha incorporado como una opción más que válida entre nuestro profesorado y alumnado, pues hemos podido experimentar las ventajas que ofrece: aprendizajes significativos, motivación y servicio útil a la comunidad.
Desarrollar en nuestro alumnado habilidades sociales y organizativas necesarias para integrar un equipo de trabajo.
Este objetivo nos ha permitido avanzar enormemente en entender que para poder trabajar en equipo es imprescindible fomentar el desarrollo de habilidades sociales como la escucha, la confianza, la participación, la ayuda y el dejarse ayudar, la comunicación, la resolución de conflictos, la habilidad de animar y reforzar. Estos aspectos se han trabajado tradicionalmente en las tutorías, pero darnos cuenta de lo importante que son y hacerlo visible, nos ha permitido comenzar a integrar la importancia de impulsar estas habilidades desde todas las áreas. Aún queda camino por recorrer, pero hemos avanzado.
También hemos reforzado habilidades organizativas como el tener claro las tareas que se asignan, los tiempos y plazos. Para esto nos hemos ayudado de documentos de gestión de proyectos y de los propios cuadernos de equipo. No obstante, en este aspecto aún tenemos que mejorar, pues verdaderamente los cuadernos se han utilizado sólo en algunas áreas. Una de las razones es el limitado tiempo de los períodos de clase y el limitado número de horas de que se dispone en la mayoría de las áreas. Esto actúa siempre a la contra, unido al hecho de que el profesorado de nueva incorporación no está acostumbrado a utilizarlos y en un curso son muchas las nuevas formas de hacer que se acumulan en nuestro centro.
Una de las habilidades organizativas que aún nos cuesta dominar es el mantener el volumen o tono de voz bajo cuando los equipos trabajan en sus proyectos y actividades.
Implementar la responsabilidad personal y el rendimiento individual del alumnado.
Es una opinión común entre nuestro profesorado considerar que el rendimiento de nuestro alumnado se ve beneficiado gracias a la aplicación de estrategias y técnicas de aprendizaje cooperativo. La interacción entre iguales, unida a la interacción con el profesor, hace que nuestro alumnado avance en su rendimiento y consiga sus objetivos. No obstante, nos damos cuenta de que es difícil para algunos docentes mantener en el tiempo la aplicación de estas estrategias. Las razones más habituales son la falta de tiempo de preparación, pues la mayoría de los docentes cuentan con una carga horaria excesiva, además de períodos cortos y pocos encuentros semanales. A ello se une, como comentábamos más arriba, el poco hábito del profesorado y la poca motivación de algún sector del profesorado que está sólo de paso. Para el curso que viene nos planteamos priorizar el uso de la metodología de aprendizaje cooperativo en el primer ciclo, de manera que se pueda coordinar de una manera más efectiva.
Por otro lado, uno de los instrumentos que nos ayudan a fomentar la responsabilidad individual son los documentos de gestión de equipo que ya consensuamos en cursos pasados. Si bien ha aumentado el número de docentes que los usa, aún no está completamente extendido. No obstante, hemos avanzado, pues en algunos casos se utilizan parcialmente o se sustituyen por otros.
Manejar adecuadamente la evaluación del trabajo en equipo y de los proyectos de equipo.
Uno de los puntos débiles que tenemos es la evaluación del trabajo en equipo. Tenemos un documento para facilitar la co y autoevaluación de los proyectos de equipo, pero somos conscientes de que debemos mejorarlo, pues no resulta todo lo efectivo que desearíamos.
Así pues, este objetivo nos queda pendiente, pues el grado de consecución que hemos alcanzado no nos satisface plenamente.
2- LOGROS MÁS SIGNIFICATIVOS EN EL CENTRO TRAS LA TRANSFERENCIA DE LO APRENDIDO
Fomento del voluntariado a través de la incorporación de la metodología de Aprendizaje-Servicio.
Los alumnos empiezan a integrar de forma natural que las acciones voluntarias son parte importante y necesaria en una sociedad y empiezan a sentirse como los ciudadanos activos que ya son, con capacidad de aportar y promover cambios en su entorno.
Trabajar esta metodología ha permitido conectar, ya de forma indiscutible, el recién creado departamento de cooperación y desarrollo humano con el entramado formativo de nuestro centro.
Consolidación de las propuestas metodológicas que nuestro proyecto educativo recoge.
El aprendizaje cooperativo y el desarrollo de proyectos de equipo se van asentando en nuestro centro y de esta manera todos contribuimos a fomentar la adquisición de habilidades sociales y organizativas, además de la responsabilidad individual de nuestro alumnado.
Incremento de la corresponsabilidad y el compromiso entre los miembros del claustro.
Participar de forma conjunta en que determinadas prácticas motivadoras e ilusionantes se consoliden en nuestro centro y tomar conciencia de los logros que pasito a pasito cosechamos contribuye a reforzar el vínculo entre los miembros del claustro y a que todos adoptemos una postura más activa en la corresponsabilidad que compartimos para que el centro funcione.
Satisfacción porque hemos visto éxito y emoción en muchas de las acciones emprendidas.
Terminar el curso con un buen grado de satisfacción creo que es uno de los grandes logros. Nos sentimos orgullosos por el trabajo realizado porque ha sido creativo, porque lo hemos ofrecido, porque hemos aprendido, porque lo hemos disfrutado. Sin duda, añadir la dimensión servicio a algunos de nuestros proyectos ha contribuido en gran medida a este sentimiento compartido de satisfacción. Ha sido abrir la puerta de par en par a múltiples contenidos transversales y a valores como la solidaridad, el cuidado de uno mismo y del entorno, el respeto. Y todo ello nos ha invitado a incorporar y trabajar también con nuestras emociones.
3- LOGROS MÁS SIGNIFICATIVOS EN CADA AULA TRAS LA TRANSFERENCIA DE LO APRENDIDO.
La transferencia al aula de la metodología de aprendizaje cooperativo y los proyectos de equipo combinada con la nueva dimensión de aprendizaje servicio ha implicado cambios en los siguientes aspectos:
Selección de recursos. En muchos de los proyectos que se han llevado a cabo se ha utilizado una variedad más amplia de recursos. Por ejemplo:
Variedad de herramientas digitales: prezzi, presentaciones goggle drive, piktochart, powtoon, canva, glogster, buncee, etc¿
Variedad de productos finales: vídeo reportajes, presentaciones orales, revistas, feria informativa y de productos ecológicos locales, carrera solidaria, festival de colores por el Sahara, plantación de plantas aromáticas, creación de contenedores de papel, creación de cortos, espectáculo audiovisual, diseño de objetos y prendas con elementos de reciclaje, etc..
Visitas de expertos para charlas y talleres formativos.
Herramientas de evaluación. Los siguientes son ya instrumentos de evaluación habituales en nuestro centro en todas las materias:
La participación voluntaria en diversas actividades.
Tutorizar o prestar ayuda a los compañeros.
Los proyectos de equipo.
La tarea integrada.
Agrupamientos del alumnado
Organización de equipos base. Este curso hemos avanzado un poco más en consolidar la forma de agrupar a nuestro alumnado desde el comienzo de curso. Primero los equipos se organizan al azar y a partir de la evaluación inicial, el tutor, con ayuda del departamento de orientación, propone la distribución del alumnado en los equipos base que se prolongarán en el tiempo y se revisarán en cada sesión de evaluación.
Agrupaciones esporádicas. De forma cada vez más ágil, procedemos a realizar otras agrupaciones (homogéneas, de expertos, parejas, tutor y tutorando) en las diferentes materias.
Agrupaciones internivelares. Por segundo año consecutivo, realizamos una agrupación internivelar para desarrollar la tarea integrada, lo cual está resultando un rotundo éxito entre el alumnado, además de revelarse como un instrumento verdaderamente rico y eficaz.
4- PRODUCTOS, EVIDENCIAS DE APRENDIZAJE QUE SE HAN GENERADO
Este curso, la mayoría de los documentos o materiales para uso del profesorado se han elaborado por parte de la coordinación del proyecto. En su mayoría ha sido compendio de otros materiales ya utilizados en cursos anteriores y en otros casos han sido referencias a páginas web o materiales públicos presentados de formas diversas:
Cuadernillos para las sesiones de formación inicial
Presentaciones digitales
Enlaces de referencia
Por su parte, el profesorado ha creado infinidad de materiales para uso en sus propias aulas. No todos ellos están recogidos en Colabora dado el volumen de actividades que nos vemos obligados a atender y el ritmo vertiginoso de la sucesión de todas ellas. Entre los materiales más habituales destacamos:
Guiones de proyectos de cada materia, documentos de planificación y seguimiento y rúbricas de co y autoevaluación.
Propuestas de taller para la tarea integrada. Este curso habrá un total de 13 talleres que giran en torno a la idea de futuro y en cuyo desarrollo participa todo el claustro.
Unidades integradas de diversas materias.
Proyectos de aprendizaje-Servicio.
Los productos finales del alumnado, como se especifica más arriba, son muy variados.
Con todo ello, las competencias docentes que se han conseguido son las siguientes:
Gestión de aula
Gestión de proyectos de equipo
Impulso de las habilidades sociales
Fomento del voluntariado y desarrollo de la competencia social y ciudadana
Mejora de la competencia digital
5- DIFICULTADES ENCONTRADAS.
Las principales dificultades encontradas son externas:
Gran volumen de trabajo. Desarrollar un curso académico tiene muchas exigencias y demandas relacionadas con la esencia de nuestra profesión: la preparación de las clases, ajuste a las nuevas metodologías y recursos, elaboración de programaciones ajustadas a la diversidad, innovación, reciclaje, etc.. A ello se une el elevado nivel de actividad de nuestro centro en particular. En efecto, nuestro centro está involucrado desde sus comienzos en un ambicioso programa de intercambios internacionales, numerosas actividades complementarias, así como en otros programas y proyectos: Feria de las Ciencias, First Lego League, Jóvenes con Investigadores, Programa de creatividad literaria, Tarea Integrada y diversos programas de cooperación (comercio justo, banco de alimentos, etc¿)
Gran cantidad de horas lectivas que tenemos como docentes.
Elevado número de alumnos por docente, especialmente los que imparten materias de sólo dos o tres horas semanales.
Limitado horario regular y no regular de que disponemos.
A nivel interno, podríamos reseñar las siguientes dificultades:
Poca motivación por parte de algún sector del profesorado, sobre todo provisional.
Desigual grado de implicación y asunción de responsabilidades en el proyecto.
No sería justo hablar de dificultades sin nombrar también las oportunidades y factores internos que propician que este proyecto de formación concluya con éxito:
La asistencia al grueso de las sesiones ha sido alta. Más del 60% del profesorado ha asistido regularmente a todas las sesiones convocadas, y todos los miembros del proyecto han participado en las sesiones iniciales y en las del tercer trimestre dedicadas a la tarea integrada.
La información y contenido de cada una de las sesiones, así como los materiales de trabajo se comparten con todos los participantes a través de la aplicación drive y el site del departamento. De esta manera, la práctica totalidad del claustro aplica y desarrolla tanto estrategias de trabajo cooperativo como proyectos de equipo, si bien la implicación, lógicamente, es diversa, pues reunimos diferentes y diversos ritmos de trabajo y aprendizaje. No obstante, y por lo que se deduce de las valoraciones realizadas, a pesar de los diferentes ritmos, intensidad o incluso efectividad en la aplicación de lo aprendido todos muestran satisfacción por la utilidad del proyecto.
El claustro en general apoya de manera activa o pasiva que se puedan desarrollar estas metodologías.
El clima de trabajo ha sido muy bueno. Las sesiones se han celebrado de forma muy distendida y generalmente en torno a una ¿merienda¿ improvisada que ha favorecido el intercambio de experiencias. Esto, a su vez, ha contribuido a extender el entusiasmo de algunos y ha disminuir los posibles temores o miedos de otros.
El ritmo de trabajo ha sido bueno, aunque a veces el volumen de exigencias propìas del desempeño de nuestra profesión ha ralentizado llevar al aula los nuevos conocimientos.
La constancia, impulso y capacidad de gestión del equipo directivo.
El apoyo del departamento de orientación.
El compromiso y disponibilidad horaria del departamento de formación.
6- OPORTUNIDADES DE MEJORA.
Las oportunidades de mejora que se exponen tienen que ver con algunas de las debilidades encontradas en el desarrollo del proyecto. Si bien ya se han descrito en el primer apartado, junto al análisis del grado de consecución de los objetivos, se especifican también aquí:
Uso regular de los cuadernos de equipo, priorizando el primer ciclo y revisando el diseño de los que tenemos. Constatamos que esta herramienta no se utiliza de forma habitual en la mayoría de las materias. En muchos casos, como ya hemos indicado, se debe a la dificultad de organizar las sesiones de manera que quede tiempo para cumplimentar este cuaderno. Pero por otro lado, la falta de hábito también tiene que ver con el todavía escaso valor e importancia que concedemos al desempeño de los roles de los miembros de cada equipo. Este aspecto aún no está suficientemente integrado en la dinámica de los equipos, ni en el desempeño del profesorado y los tutores. Es cierto que las tutorías son el espacio ideal para desarrollar esta herramienta, pero el plan de acción tutorial también es muy amplio y el encuentro semanal resulta a veces insuficiente para abordar todos los asuntos que se requieren. Además, notamos que el alumnado en general se muestra más reacio a su uso en el segundo ciclo en donde el incremento de optativas complica la estabilidad de los equipos base, de ahí que consideremos más oportuno priorizar y coordinar su uso en el primer ciclo. Por otro lado, también es cierto que quizás convenga actualizar y mejorar su diseño para hacerlos más efectivos y útiles.
Uso extensivo y habitual de documentos para la gestión de los proyectos de equipo. Algunos docentes han adoptado los elaborados el curso pasado con buenos resultados, pero la mayoría sólo parcialmente, por lo que debemos insistir en los beneficios del uso de estos u otros similares.
Analizar y ajustar la evaluación del trabajo en equipo. Debemos no sólo conseguir documentos más efectivos de co y autoevaluación de los proyectos de equipo, sino también incorporar otras estrategias de evaluación y calificación del trabajo diario en equipo que realiza nuestro alumnado.
Extraer las propuestas de proyecto de Aprendizaje-Servicio del ámbito de implicación y motivación del profesorado. Hemos detectado que estos proyectos funcionan mejor cuando el profesor coordinador de los mismos se siente implicado o motivado personalmente en el tema u objeto del proyecto.
