Esta mañana entre en clase con dos botes de caramelos, uno de naranja y otro de limón, y lancé la pregunta ¿tendremos caramelos para todos?
Muchos contestaron que sí pero Sara dijo no lo sabemos seño, porque no sabemos si hay muchos o poco.
Y ¿qué podemos hacer?
Contarlos. Contestaron algunos. Y manos a la obra. Empezamos a contar y llegamos a 10 de limón y 20 de naranja.
¿Tenemos para todos?
Lucas nos dice que cada niño coja un caramelo. Y así lo hacen. Pero nos sobraron 7 caramelos ya que ese día faltaron dos alumnos a la clase.
¿Podemos dar otro caramelo a cada niño?
Sí dijo Iván, y cogió uno.
Lucas.- Nooo, porque somos más niños y no hay para todos.
Con esta solución llegaron a la conclusión de que habia un caramelo para cada niño y los que sobraban habían que guardarlos o partirlos en trozos para que hubiesen para todos.