Llego tarde, pero por mí que no quede presentarme. Mi intención al apuntarme este curso no era otra que tomar el pulso a lo que en el futuro se nos pedirá de forma ordinaria. Me interesa mucho el tema de la evaluación, aunque creo que debería ser algo tan claro y meridiano para los docentes como transparente debería ser también para las familias. Y no suele ocurrir ni lo uno ni lo otro, por lo que es positiva una reestructuración de los procesos.
Mi postura es muy crítica de partida, empero: las normativas son abstrusas y confusas (demasiados contenidos y objetivos remezclados diciendo lo mismo, criterios de evaluación que ahora parecen contenidos, competencias que primero eran "básicas" y ahora son "clave", etc); y Séneca debería estar mejor organizado, le sobran botones y no deberíamos tener que hacer un curso para familiarizarnos un poco al menos con una acción que en vez de arcana debería ser natural (además, volverá a cambiar, y voverán a cambiar los botones de Séneca). Pero para criticar bien hay que conocer primero, claro, así que por eso me apunté.