Fecha de publicación 8/06/20 13:31
Cuando pensamos en Medio Ambiente, nos vienen a la cabeza paisajes boscosos, ríos transparentes o prados bucólicos, muy lejanos a nuestro modo y lugar de trabajo. Espacios que nos relajan, haciendonos concentrar la creatividad y favoreciendo las relaciones con los que nos rodean. Pero curiosamente, en nuestra escuela, somos unos privilegiados. Teníamos esa Naturaleza delante de nuestros ojos y pasabamos a prisa sin apreciarla. Teníamos esos espacios totalmente desaprovechados, unos jardines y estanques que llevaban siglos abandonados dentro del Palacio. Dentro de este proyecto, me encargué con otros compañeros/as en intentar recuperarlos, de hecho, llevamos varios años trabajando en ello. Ahora, tras diversas intervenciones, hemos empezado a ver algunos resultados, aunque queda mucho por hacer. Durante este periodo de confinamiento, la primavera ha completado nuestro trabajo. Aunque no podíamos acceder a esos jardines y patios, nuestro Conserje Angel, nos mandó unas grabaciones y fotos... El resultado, la primera flor de un nenúfar y un coro de mirlos, verderones y jilgueros.. Eso nos dá animos para seguir con la tarea en cuanto reiniciemos nuestra asistencia al centro.