El uso de las tecnologías de la información pasa en la actualidad por el manejo de redes de colaboración. En el ámbito educativo estas hacen interconectar a docentes entre ellos y a estos con el alumnado. La puesta en práctica de los principios sobre los que la enseñanza ha de basarse actualmente pasa por que el alumnado participe de manera cooperativa y esta cooperación debe de hacerse con el uso de las tecnologías que son ya de hecho usadas a diario (ordenador, tablet, móvil...) El profesorado, como guía del proceso de aprendizaje, debe manejar de manera activa las herramientas colaborativas para compartir, difundir y ser el motor de la puesta en marcha de la colaboración entre el alumnado, fuera y dentro del aula. La situación de partida del profesorado de nuestro centro es, en su mayor parte, la de un claustro que hace uso de las herramientas digitales de manera bilateral (de uno a uno), pero nunca multilateral. Es decir, cuando se elabora un documento se envía a uno u otro, pero nunca se propone a una comunidad mayor para su corrección, evaluación y posterior uso. Del mismo modo ocurre entre el profesorado y el alumnado. Las herramientas educativas de Google da a los centros un entorno seguro y cerrado en el que se pueden utilizar todas las herramientas conocidas de Google más otras que están vinculadas a la aplicación. El objeto último de este grupo de trabajo es la puesta en marcha de esta aplicación y ser el motor de un cambio en los modos de proceder entre nosotros y de nosotros con el alumnado, para acercarles a la manera actual de trabajar del mundo actual. Las experiencias que ya se llevan a cabo en muchos centros extranjeros y en España en particular con Chromebooks u otras herramientas que trabajan en la nube, hacen que la necesidad de formación en este sentido sea imperante.