Como comenta mi compañera, realizamos estas lecturas con los alumnos para después poder comentarlas en el aula y poner en común nuestras opiniones al respecto. Mi grupo de alumnos es muy reducido así que se repartieron la mitad de las lecturas cada grupo y fueron haciendo anotaciones sobre cosas que les podían llamar la atención, como quiénes les habían animado a estudiar una carrera tecnológica y quiénes no, etc.
En mi caso, descubrí que me sentía muy identificada con una de las historias, ya que las dos habíamos empezado programando de muy jóvenes con lenguajes muy básicos (en su caso el Pong en mi caso el BASIC), y el primer año de universidad fue muy duro porque la forma de estudiar era totalmente diferente a la que habíamos conocido hasta entonces (en mi caso, descubrí que necesitaba ENTENDER para poder enfrentarme a las materias) e incluso las dos en ese primer año de frustración tuvimos que escuchar el "cambiáte a... que será más fácil". En su caso, cambió a otra ingeniería que le resultó más fascinante y llamativa y yo continué y terminé Matemáticas, pero ambas terminamos con la misma reflexión: Puedes ser lo que quieras ser.