Situación de partida

 En el Plan de Mejora de nuestro centro y tras hacer un análisis DAFO aparecen dos propuestas relacionadas con la mejora de la convivencia, ambas parten de la resolución de los conflictos como punto de partida: La detección y prevención de los conflictos con mayor implicación de la comunidad educativa

       En una época como la que vivimos a nadie se le escapa que la resolución de conflictos es uno de los grandes retos de la sociedad actual. El conflicto forma parte de la vida y es un motor de progreso, pero en determinadas condiciones puede conducir a la violencia. Para mejorar la convivencia educativa  es preciso enseñar a resolver conflictos de forma constructiva; es decir, pensando, dialogando y negociando.

La Ley 17/2007, de 10 de diciembre, de educación de Andalucía, recoge en el artículo 4.f), entre los principios del sistema educativo andaluz, la convivencia como meta y condición necesaria para el buen desarrollo del trabajo del alumnado y del profesorado.

Asimismo para el desarrollo de esta Ley, se dictaron los decretos 327/2010 y 328/2010, que regulan los derechos y deberes del alumnado, la colaboración y participación de las familias y la constitución y el funcionamiento de la comisión de Convivencia del Consejo Escolar a fin de promover la cultura de paz y la resolución pacífica de los conflictos. Además, regulan la elaboración del Plan de Convivencia del centro para prevenir la aparición de conductas contrarias a las normas de convivencia y facilitar un adecuado clima escolar.

Un centro educativo, además de ser un espacio de aprendizaje, es un lugar de convivencia, y por ello, un espacio en el que hay conflictos que debemos abordar. Conflictos que se producen fruto de las relaciones que se establecen entre los distintos miembros de la comunidad educativa. Aprender a convivir juntos debe formar parte de lo que entendemos por calidad educativa. Aprender a resolver conflictos en el aula o en el patio del recreo permite conocer y practicar los procesos para el logro del respeto mutuo, la solidaridad y la tolerancia.

Objetivos

 1) Definir adecuadamente el conflicto y enumerar los conflictos más frecuentes que se dan en nuestro Centro.

2) Elaborar un Decálogo de buenas prácticas  que ayude al profesorado a la hora de afrontar y gestionar  los conflictos.

3) Conocer distintas formas de comunicación no verbal.

4) Profundizar y ampliar los conocimientos que capaciten al profesorado en la prevención y gestión de los conflictos en el aula. 

Repercusión en el aula

La finalidad principal de nuestro Grupo de Trabajo es mejorar la convivencia en el Centro y en el aula. La repercusión en el aula está encaminada a:

• Guiar al alumnado en la identificación de un conflicto: origen y causas.
• Trabajar en la prevención de los conflictos por medio de diferentes acciones preventivas ( conocer las normas del aula, expresar sentimientos, crear la cohesión del grupo...)
• Ayudar al alumnado en la gestión de los conflictos por medio del conocimiento y desarrollo de las habilidades sociales y la educación en valores.
• Dotar al profesorado de nuevas estrategias y pautas de actuación ante los diferentes conflictos que puedan darse en el aula.

Actuaciones

1)            Continuar con la Formación en Centro iniciada hace dos cursos.

2)           Implementar todo lo programado en el Proyecto Educativo de Centro así como en el Plan de Convivencia.

3)           Trabajar en  aquellas áreas de mejora relacionadas con la Convivencia y la resolución de conflictos recogidas en el Plan de Mejora.

4)           Desarrollar la dimensión relacional del Plan de Mejora cuyo objetivo está relacionado con la solución de los problemas, que puedan surgir dentro de la comunidad educativa,  por medio del diálogo.

5)           Crear un buen ambiente en la comunidad educativa.

Recursos y apoyos

Recursos humanos:

- Coordinador de la actividad: Encarnación Franco Pelayo

- Personal colaborador: CEP Sevilla , Asesoría externa con Silvio ( con 6 horas de trabajo).

- Profesorado participante: Maestros adscritos al presente grupo de trabajo.

Recursos materiales:

Aula con PDI.

Bibliografía especializada.

Equipos informáticos.

Estrategias e indicadores para la valoración del trabajo

A la hora de evaluar tendremos en cuenta tanto el proceso como el resultado. Dentro del proceso se evalúan los siguientes aspectos:

§  Implicación y participación de los miembros del grupo.

§  Actitud frente al tratamiento de los contenidos.

§  Los contenidos tratados se ajustan a los objetivos programados.

§  La dinamización del grupo por parte de la coordinadora es adecuada y propicia la participación activa.

§  Las dinámicas utilizadas son apropiadas y llevan a la reflexión grupal.

La evaluación que pretendemos desde el CEP será cualitativa.

         Los instrumentos que utilizaremos para evaluar la marcha del proyecto  estarán basados en el registro de todas las aportaciones tanto individuales como grupales que serán utilizadas para la posterior puesta en acción.