Como consideraciones finales expondré varias ideas muy resumidas.

En primer lugar, creo que en particular y en grupo hemos descubierto las posibilidades tan amplias y tan prácticas que nos ofrece el Cuadero SÉNECA en nuestra práctica docente diaria. Se nos muestra como un instrumento eficaz en la programación didáctica, en la comunicación con las familias  y en un estupendo banco de recursos.

También, quiero dejar constancia, que el proceso de nuestra formación en centro no ha sido optimizado porque creo que se invirtió demasiado tiempo en unas consideraciones previas de la necesidad de una evaluación en competencias, cosa que en nuestro claustro ya estaba asumido desde hacía algunos cursos con nuestra puesta en marcha de las rubricas elaboradas en el colegio desde esta óptica en las áreas de Lengua (castellana e idioma extrangero) y Matemáticas.

A consecuencia de lo antes expuesto, creo que el tiempo dedicado a ese menester entorpeció el avance en el conocimiento, uso y construcción del cuadreno de SÉNECA propiamente dicho en cada Ciclo/Tutoría. A lo que se le ha sumado la desafortunada circunstancia histórica de la pandemia del Coronavirus que nos ha dejado con dicho proceso iniciado, pero con pocos avances.

Para finalizar, debo decir que sería totalmente necesario terminar con este trabajo cuando nos sea posible, bien en la finalización del presente Curso 2019/20 o en el siguiente Curso 2020/21, para tener en pleno rendimiento este eficaz instrumento educativo.