Contenidos recientes Contenidos recientes

Atrás

El PRODIG durante la pandemia

Buenas tardes, compañeros:

Nos piden que compartamos experiencias sobre cómo nos ha ido durante el transcurso de las clases no presenciales, relacionado con las herramientas informáticas usadas, y no quería dejar de participar.

En primer lugar, me gustaría decir que, afortunadamente, tenía ciertas nociones del uso de las herramientas que teníamos a nuestra disposición:

- Al no tener un libro de texto establecido en mis clases, he utilizado la plataforma del instituto para colgar materiales (textos para trabajar, soluciones...) que les sirviera a mis alumnos. 

- Además, al impartir una asignatura semipresencial, también estaba acostumbrada a utilizar la plataforma Moodle de la Junta. Esta, a pesar de haber recibido un curso online, no era utilizada al 100%, me quedaba por averiguar cómo funcionaban ciertos aspectos que he ido descubriendo durante el confinamiento, y otras que me quedan por aprender (como la evaluación).

- Asimismo, conocía algunos usos de Gsuite (sobre todo lo relacionado con el Drive, como espacio donde guardar y compartir documentos, o cómo crear colaborativamente documentos).

Pero todo este conocimiento previo fue insuficiente. Rápidamente, tuve (como todos) que ponerme a investigar para sacarle más partido. Las convocotarias desde el Equipo Directivo a través del Meet, me enseñó a hacer lo propio con mis compañeros del departamento y con mis alumnos, y utilizando, por tanto, videoconferencias. 

Lo primero que hice fue pedirles, a mis alumnos, que utilizaran su correo corporativo, para ello les colgué un documento en la plataforma del instituto (que ya usábamos) para explicarles cómo acceder a ella (gracias a las indicaciones de Javier Soldado). Después creé un grupo con los correos (tengo pendiente aprender más sobre este aspecto) y los convoqué a través del Calendar

La experiencia con las videoconferencias no fue, sin embargo, muy satisfactoria. No ya porque mis alumnos, realmente, no tenían mucho interés en formular cuestiones, dudas...; sino porque se quejaban de que el sonido no era muy bueno. Yo, de que no fuese una comunicación directa, rápida y más activa. 

El uso a diario de la plataforma del instituto me ha servido para programar mejor las sesiones de clase: localizaba vídeos cortos con la materia que tocaba y tenían que tomar apuntes, después realizar unas actividades y que, posteriormente (cuando subía la solución), debían autocorregir. He aprendido a hacer cuestionarios online (aunque veo que mi desconocimiento formal me ha impedido sacarle más partido); que los alumnos no leen lo colgado, se limitan a cumplir con los plazos (en la mayoría de los casos); que hay multitud de formas para copiarse (y por tanto, yo debo aprender estrategias o hacerme con herramientas para evitarlo). 

Definitivamente, sí. Esta experiencia me ha servido para aprender algo más sobre las tecnologías digitales, y el comportamiento humano (sobre todo de los estudiantes), pero sobre todo para darme cuenta de mis carencias, mis necesidades. 

Promedio (0 Votos)