Hola, a continuación paso a realizar mi 3ª intervención atendiendo al guión propuesto.

En la aplicación del método en mi aula, he podido observar una actitud muy positiva y receptiva en mi alumnado. El aprendizaje se convierte en un reto continuo, que precisa de su intervención  para hallar la resolución y todo ello de una manera más dinámica, activa y lúdica.

Reflejo de ello, es la mayor habilidad que han adquirido para realizar distintas operaciones matemáticas y manejar la tabla numérica hasta el 10.

En este sentido, entre los logros conseguidos mencionaré:

• La adquisición de un mayor dominio en el conteo y en la discriminación del número de dedos sin contarlos.
• Conocer la tabla del 10 y sus amigos.
• Realizar descomposiciones.
• Más agilidad en  cálculo mental con apoyo de tarjetas y sin él.
• Mejora en el planteamiento y resolución de problemas.
• Incluso, como los de 5 años son sólo dos, se han iniciado en el conocimiento de la tabla numérica hasta el 100, sustituyendo el vocabulario de decenas y unidades por el de familia e hijos respectivamente.

Entre las dificultades encontradas citar la inseguridad en la estructuración de los contenidos, lo que está relacionado con la manera tradicional de trabajar las matemáticas, junto con la falta de recursos y materiales.

Sin lugar a dudas, considero que este método supone un cambio muy positivo en el tratamiento de las matemáticas dentro de aula, a la vez que supone un cambio importante en el enfoque que tenemos  los docentes a la hora de abordarlas ¿un cambio de chip¿. Por ello, apuesto por la continuidad del proyecto para adquirir una formación mucho más profunda. Si bien, creo que es necesaria la presencia de algún agente externo para  asesorarnos y resolver muchas de las dudas que han surgido a lo largo de la formación.

En cuanto al análisis de los compromisos adquiridos decir que dada la magnitud y envergadura del proyecto algunos se han conseguido y otros continúan  en proceso.