Coincido con Valerie en que el tema de los miedos y de las preocupaciones de los alumnos no es algo que se suela tratar muy a menudo. En mi caso, lo hago a principio de curso a modo de cuestionario y posteriormente en las revisiones de los exámenes. Con este capítulo me he dado cuenta de que es realmente importante conocer siempre tanto las expectativas como los miedos de los alumnos para que no se sientan perdidos y poder ayudarles durante todo el curso. Es importante para que así no se sientan frustrados en algún momento o que sientan que no pueden seguir el ritmo de la clase como sus compañeros.

El capítulo hace referencia al hecho de que el alumnado tiene una actitud predeterminada y unas expectativas sobre el curso que va a realizar. Nosotros como docentes podemos influenciar esos sentimientos que de antemano trae el alumnado con el fin de reforzar sentimientos positivos o bien cambiar sentimientos negativos que no favorecen una predisposición adecuada para el aprendizaje.
El capítulo también nos hace reflexionar sobre si debemos dejar que el alumnado exprese sus preocupaciones y expectativas en base a diferentes tipos de temores descritos que el alumnado adulto tiene antes de empezar un nuevo curso o clase.
Además, algunas actividades propuestas nos hacen reflexionar sobre el tipo de información que podemos pasar al alumnado con el fin de responder a temores y expectativas ocasionadas por el nuevo curso académico. Dicha información incluye metodología a seguir, proceso de evaluación del alumnado o contenidos que serán parte de la estructura del curso.

Para no repetir lo que han mencionado mis compañeros, yo quería compartir mis conclusiones sobre este tema. Para intentar eliminar miedos se puede:
- Adelantar metodología y contenidos en la presentación (primer día de clase), y al inicio de cada unidad. Si fuera posible al inicio de cada clase, sería una muy buena medida.
- Eliminar la palabra examen cuando vamos a hacer alguna prueba.
- Dar instrucciones muy claras.
- Dar feedback adecuado (tanto positivo como negativo)
- Tutorías personalizadas en las evaluaciones

La verdad que este capítulo ha sido muy interesante porque me ha hecho reflexionar sobre ciertos aspectos del alumnado, como por ejemplo, sus miedos, motivaciones, dificultades... Me he dado cuenta de lo importante que son sus expectativas, que no siempre coinciden con la realidad y es esto lo que después dificulta que entiendan por qué no superan alguna prueba. Es muy interesante trabajar durante todo el curso y sobre todo en momentos en los que reciben alguna calificación por nuestra parte, y por supuesto no tiene que ser necesariamente después de un examen.