CONJUNTO DE ACTUACIONES IMPLEMENTÁNDOSE EN EL PROYECTO

Comentaré las actuaciones punto por punto, aprovechando de paso para hablar de la valoración de cada una de ellas tanto en el centro como en el aula

Puesta en común previa de los contenidos a trabajar en cada sesión de instrumento y de lenguaje musical.

Este me parece uno de los puntos más fuertes de nuestro proyecto. Veo primordial la colaboración y el trasvase de información que se está llevando entre lenguaje musical e instrumento. Para ilustrarlo simplemente pondré un ejemplo: en mi clase suelo tener problemas cuando les explico los sostenidos y bemoles, no ya en 1º de EEBB, sino en 2º e incluso 3º. Pues bien, en una de las reuniones comenté esto, y en la clase siguiente cuando empecé a mostrarles cómo se hacían o dónde estaban determinadas notas alteradas en el violonchelo, lo entendieron sin problema y rápidamente porque previamente su profesora Carmen les había hecho una explicación acerca de las notas alteradas en el piano.

Reflexión conjunta por parte de los profesores, acerca de los contenidos trabajados en cada sesión.

Este aspecto de nuestra forma de trabajar creo que ilustra bastante bien lo mejor y lo menos bueno de nuestro proyecto. Lo mejor porque nos está sirviendo para enriquecer nuestro bagaje pedagógico con las casi siempre interesantísimas aportaciones e ideas de todos y cada uno de nosotros. Lo menos bueno porque, a nivel organizativo, el hecho de que haya tantas ideas hace imposible que se puedan aplicar todas por razones de falta de tiempo, y a su vez el hecho de elegir entre unas aportaciones y otras nos acarrea emplear un tiempo precioso que sería mejor dedicar a cuestiones más puramente pedagógicas. Personalmente, creo que podría solventarse en parte el problema si hubiese algún tipo de liderazgo a nivel organizativo (no necesariamente concentrado en una o unas pocas personas; quizás repartiendo tareas o facetas entre todos los integrantes y otorgando libertad a cada uno de ellos en la organización de esas tareas, sin que se haga imprescindible debatir y consensuar absolutamente todos los detalles puramente prácticos u organizativos).

Preparación conjunta de la audición final del primer trimestre, alumnado y profesorado.
Audición pública del primer trimestre por parte de todo el alumnado implicado en el proyecto.


De acuerdo en esto con Rocío en lo sumamente positiva que fue la audición del primer trimestre. Que los niños interaccionen con otros instrumentos tan pronto, canten y toquen de memoria... son muestras de que el camino iniciado pinta bien para el futuro. De nuevo se dan complicaciones a nivel organizativo y por eso ha sido mejor replantear el formato de la audición y de los ensayos de este trimestre, pero os animo y nos animo a no desfallecer ni caer. Hay que tener en cuenta que estamos tratando de llevar a cabo cambios muy drásticos, es normal que a veces no tomemos las mejores decisiones porque estamos en un período embrionario en el que hay muchas cosas en el aire y menos certezas de las que nos gustaría. Con el tiempo se nos irán aclarando las cosas y todo irá más rodado, pero hay que asumir que no va a ser fácil ni rápido ni cómodo. Aún así merece la pena el riesgo y los quebraderos de cabeza porque intuyo que estamos empezando a poner un pequeñito pero muy importante granito de arena para dejar atrás de una vez por todas procedimientos anacrónicos en la enseñanza musical (puff, qué intenso me he puesto)

Realización de un taller de improvisación de blues con el alumnado.

Muy interesante actividad. Me resulta emocionante ver cómo niños de 8 años, con sus limitados recursos técnicos, se inician en la improvisación, cosa que yo, por ejemplo, no hice hasta 20 años después de su edad. Pienso que tanto en estos talleres como en los ensayos conjuntos se deben plantear cosas que se están dejando un poco de lado. En general veo todo esto como una combinación de revolución (muchos cambios muy drásticos) y reforma (muchas cosas ya las hacíamos bien y simplemente hay que actualizarlas o readaptarlas). Me refiero a cosas tan de músicos "clásicos" como la búsqueda del mejor sonido y la mejor afinación siempre. Para nada está reñido esto con otorgar mayor libertad y vivencia a nuestros alumnos. Sé que todos coincidimos en esto y por eso me pregunto si habría que hacer un mejor balance para conseguir determinados objetivos que son primordiales para nosotros y nuestro proyecto (oído armónico, emancipación de la partitura, interpretación más libre y consciente a la vez...) sin que suponga menoscabo en aquellos otros que son igualmente importantes (calidad del sonido, sincronización al tocar en grupo, respeto de los planos sonoros...)

Formación de dos sesiones para el profesorado, en el primer trimestre, sobre metodologías innovadoras en la enseñanza de la música.
Organización de un curso de formación previsto para el final del segundo trimestre en el que participarán tanto alumnado como profesorado implicados en el proyecto.

Por no repetirme con comentarios realizados anteriormente, simplemente decir que la formación del primer trimestre me pareció 100% adecuada, sin ningún pero que poner, y que espero observar lo mismo sobre la que está por venir.

Para terminar, quiero agradecer encarecidamente a todos por vuestras aportaciones, a Carmen y su formación Willens y su coordinación, a Esteban y su taller, Julia y Rocío y sus arreglos, Bego y Carmen Inés y su organización, Sara y su arrojo, Muskilda, Corrales, Pedro, Alejandro, Cristina, Valderas... Quizás me deje alguien; si así es, que esa persona piense que a veces vale más lo que se oculta que lo que se ve.

Para empezar muchas gracias a todos, esta siendo muy enriquecedor colaborar contigo vosotros en este proyecto.
Cómo valoración principal he de decir que lo más positivo está siendo el esfuerzo que se está haciendo para coordinarnos en las sesiones.
En lo referente al alumnado puedo asegurar que vienen a clase bastante motivados.
En mi caso he de esperar más al final del curso para sacar conclusiones acerca del proyecto, aunque en general por ahora me está resultando positivo.
Seguimos

VALORACIÓN DE LAS ACTUACIONES EN CENTRO Y AULA

La audición pública conjunta fue muy satisfactoria para todo el colectivo: para profesores, motivándonos a continuar en este nuevo modelo metodológico, para alumnado, en concreto mis alumnas preguntan constantemente cuando será la próxima porque disfrutaron mucho, y para las familias, observando que las enseñanzas en los conservatorios pueden ser de otra manera.

El curso de formación del primer trimestre con Aida Marín nos descubrió, expuesto de una manera extraordinaria por la ponente, otras maneras de afrontar la enseñanza en la iniciación musical. Quizá comentar que me resultó corto, ya que creo que hubiera sido interesante que los profesores nos marcaramos una serie de objetivos a trabajar, y que fueran analizados e implementados a lo largo del curso por la ponente.

En cuanto a mi metodología en las clases de flauta travesera, puedo analizar los siguientes puntos:

- He podido comprobar que el comienzo del aprendizaje con la flauta travesera liberándonos de la partitura, consigue un progreso más rápido y mucho más interiorizado.

- El aprendizaje de la técnica básica del instrumento se produce de una manera más natural, al basarse en patrones imitativos y de pura experiencia.

- El uso de la memoria musical mejora exponencialmente.

- Al liberarnos al principio de la partitura, permitimos que los alumnos utilicen el oído como herramienta básica de autocorrección.

- De manera espontánea, las alumnas empiezan a descubrir las cualidades del sonido, el concepto de tonalidad, la estructura, etc... sin que estén basados en conceptos puramente intelectuales.

- Cuando tienen una partitura delante, comienzan a descifrarla, porque ya se saben antes las piezas musicales de memoria, y les permite descubrir por ellas mismas el paso al lenguaje escrito (¿primero se habla, luego comprendo el código con el que hablo de manera natural para comunicarme, y luego lo escribo¿).

- Quizá, para una mejor aprehensión del lenguaje escrito, debería fomentar desde clase la composición y posterior escritura de piezas creadas por ellas mismas.

- Necesito conocer mejor las herramientas de improvisación musical para ponerlas en práctica en clase.

- No estoy utilizando todo lo que me gustaría el movimiento corporal en clase, quizá debido a lo mismo que expreso en el punto anterior.

Conjunto de actuaciones implementándose en el proyecto
 
Puesta en común previa de los contenidos a trabajar en cada sesión de instrumento y de lenguaje musical:

Como comentan los compañeros, es uno de los puntos fuertes del proyecto. La asignatura de Lenguaje Musical vertebra los contenidos de aprendizaje del proyecto, especialmente a través de las canciones, pero su generalidad no siempre da respuesta a las particularidades técnicas y pedagógicas de cada instrumento. La puesta en común permite conocer las necesidades educativas de cada especialidad, tales como las alteraciones en chelo o las texturas de melodía, acompañamiento y bajo para el alumnado de contrabajo. Por ello, las sugerencias de los profesores de instrumento de incluir determinados conceptos en Lenguaje Musical y la coordinación entre todos son fundamentales en este proyecto.

Reflexión conjunta por parte de los profesores, acerca de los contenidos trabajados en cada sesión.

Semanalmente compartimos ideas y conclusiones. Esto nos permite detectar aciertos y errores y modelar constantemente la práctica educativa. No obstante, la falta de una experiencia previa y de una línea pedagógica clara -descubrimos sobre la marcha- provocan que el tiempo de reflexión exceda al de organización y dificulta que ésta se concrete en la práctica, dilatando los plazos. Sin duda, la experiencia de este trimestre se verá reflejada en el siguiente a la hora de concretar el trabajo y optimizar los tiempos.

Preparación conjunta de la audición final del primer trimestre, alumnado y profesorado.

Supuso un esfuerzo extra de coordinación por el elevado número de alumnos -alrededor de treinta-, la falta de espacios adecuados -aulas pequeñas, sillas inapropiadas-, la preparación de tantos instrumentos de distintas características, la novedad de un ensayo para los pequeños, la disparidad de horarios y el reducido número de sesiones, etc. Por ello, me gustaría destacar la generosidad de los compañeros al dedicar parte de los contenidos de sus clases -técnica, etc.- en pro del conjunto y su profesionalidad, atentos a resolver todas las dudas de sus alumnos.

Audición pública del primer trimestre por parte de todo el alumnado implicado en el proyecto.
Ver a alumnos tocando y cantando juntos, coordinados, ensamblando familias de instrumentos tan distintas, aprendiendo a escucharse, creando un espectáculo musical sin necesidad de estar sometidos a los cauces tradicionales -partituras, no canto, un único instrumento- ha sido el culmen del trabajo del primer trimestre y uno de los momentos en que se mejor se han visto reflejados el trabajo y los ideales del proyecto de innovación. Creo que un aspecto positivo ha sido el que la audición fuera consecuencia del trabajo de clase. Esto permitió al alumnado sentirse relativamente cómodo, y vivir el momento con ilusión, lejos de la presión y el miedo al error que a veces son habituales.

Realización de un taller de improvisación de blues con el alumnado.

La improvisación es uno de los apartados fundamentales de nuestro proyecto, Que hagan suyo el lenguaje musical y sean capaces de de hablar "música". Aplaudo a los compañeros por la iniciativa y me resulta muy enriquecedor que en tan poco espacio de tiempo los pequeños estén desarrollando esta capacidad y conociendo sonoridades distintas, quizás incluso más familiares a su ambiente que la propia música clásica.

Formación de dos sesiones para el profesorado, en el primer trimestre, sobre metodologías innovadoras en la enseñanza de la música.

Estas sesiones de formación son esenciales para un profesorado que inicia su andadura necesitado de referencias, herramientas y otros puntos de vista. Han resultado indispensables para aportarnos recursos que no teníamos y detectar carencias, nos han abierto nuevas posibilidades rompiendo los límites que nosotros mismos arrastramos y proporcionado una dirección sobre la que ir construyendo. Mi enhorabuena a las ponentes.

Organización de un curso de formación previsto para el final del segundo trimestre en el que participarán tanto alumnado como profesorado implicados en el proyecto.

La necesidad de formación para afrontar con garantías las partes más olvidadas de la enseñanza musical -creatividad, improvisación, aprendizaje significativo, música y movimiento, etc.- es una realidad. Agradecer las facilidades del CEP, del Conservatorio Joaquín Villatoro y los organismos implicados, así como del profesorado en la organización del mismo para hacerlo posible.
 
Valoración del grado de ejecución de las actuaciones planificadas para el centro

Respecto a la las sesiones de formación de Carmen Barberá y Aída Marín, han sido vitales para ir guiando nuestros pasos. Mi valoración es muy positiva y animo a que continúen.

En relación a la audición de alumnos como actuación planificada, estoy de acuerdo con los compañeros en que la lectura ha sido muy satisfactoria. Alumnado, profesorado y padres y madres en general se sintieron ilusionados y contentos, y así lo transmitieron al finalizar la audición. Ésta fue consecuencia del trabajo de clase. Esto, como he comentado con anterioridad, permitió que los niños y niñas tuvieran las canciones interiorizadas y que la audición se desenvolviera con naturalidad, a pesar de haber contado con pocas sesiones para organizarla de forma conjunta.

Como consecuencia, este segundo trimestre nos propusimos la organización de la audición cuanto antes para evitar apresuramientos y que los estudiantes se sintieran seguros en el escenario. Sin embargo, creo que nos hemos marcado unos objetivos altamente ambiciosos para el nivel real del alumnado. Esto ha hecho que el trabajo de clase se haya condicionado a la audición, desnaturalizándose, y se ha dedicado menos tiempo a cuestiones técnicas también imprescendibles.
 
Valoración del grado de ejecución de las actuaciones planificadas en cada aula

Las reflexiones y planificación que tienen lugar en las reuniones semanales se recogen constantemente y tiene su aplicación en clase. Como he escrito antes, esto permite ir adaptando la acción educativa a las necesidades de los alumnos implicados y detectar carencias que, de otro modo, el profesorado de Lenguaje pasaría por alto.

Emplear las canciones como nexo entre lenguaje e instrumento despierta en los estudiantes la motivación, un aprendizaje realmente relevante y desarrolla la idea de la música como un ente global y no compartimentada en asignaturas, dándole un sentido a los contenidos aprendidos.

No obstante, también hemos encontrado dificultades en la ejecución de las actuaciones:

- La reflexión ha superado a la organización. Una vez fijados los objetivos generales, habría sido más eficaz una programación más temprana y concretada en el tiempo, de forma que la elaboración de materiales hubiera estado antes y nos hubiéramos centrado más en la metodología y el cómo que en el qué enseñar y cuándo.

- La audición del segundo trimestre ha eclipsado los contenidos de clase y se ha planificado con expectativas demasiado ambiciosas para el tiempo material y el nivel del alumnado. Esto, a su vez, además de cierta frustración profesional, ha tenido como consecuencia que se olviden otros aspectos esenciales en nuestra idea pedagógica como la armonía y grados tonales, la improvisación, etc.

- En relación con el punto anterior, debemos -o debo personalmente- aprender a integrar contenidos menos valorados tradicionalmente - improvisación, creatividad, expresión, etc.- con los tradicionales, sin que el ahondar en unos suponga desatender otros. Lo serían en la asignatura de lenguaje musical la escritura, la lectura de notas, el dictado o la teoría, donde mis alumnos presentan, hoy por hoy, carencias. Tal vez no deban tratarse como apartados independientes. Me gustaría saber en esta nueva metodología cómo incluirlos y ligarlos unos con otros, pero de forma ordenada y sistematizada.
Para ello, sigue siendo imprescindible la formación.

Conjunto de actuaciones implementándose en el proyecto

En las reuniones semanales se han hablado constantemente de nuestra forma de trabajar, exponiendo interesantes ideas de todos, que nos han servido para ir construyendo un camino para nuestro propio proceso de aprendizaje. Ha sido enriquecedor para mí observar y aprender las características y necesidades pedagógicas de cada instrumento y esto nos ha servido para abrir nuestra mente y ser capaces de trabajar todos en conjunto. Que los alumnos desde primero estén en contacto con otros instrumentos, que toquen juntos, canten¿ creo que es un muy enriquecedor para nuestros alumnos.
Estas aportaciones semanales nos permiten aprender los unos de los otros, detectar errores, proponer distintas actividades e ir adaptando nuestra forma de enseñar a los alumnos. Pero del mismo modo, como han dicho alguno de mis compañeros, estas reflexiones por falta de experiencia terminan divagando y provocan que se extienda el tiempo de organización, dificultando la práctica real.

Valoración del grado de ejecución de las actuaciones planificadas para el centro

En cuanto a las actividades creo que ha sido muy enriquecedor tanto para los alumnos como para nosotros.
Empezaré por la audición del 1º trimestre: un aspecto muy importante fue ver a los niños cantando. Normalmente (exceptuando en algunas clases de Lenguaje y con muy poco tiempo semanal) no se suele canta en grupo hasta 3º de básica, centrándonos únicamente en tocar, aspecto que con este proyecto hemos cambiado y hemos visto mejoría. Porque cantar es sumamente importante, para interiorizar ritmo, giros melódicos, armonía y otros tantísimos aspectos. El hecho de conectar lo que están cantando en lenguaje musical con lo que están tocando ha hecho que los alumnos aprendan de forma más global e interiorizando la música mucho mejor. El buen resultado que ofrecieron fue gracias al trabajo de todos los profesores, enhorabuena a todos.
El taller de blues impartido por Esteban, pude observar que con muy poquito los alumnos se pueden llevar un gran aprendizaje. En esa hora, los alumnos aprendieron a improvisar, a acompañar, a escucharse y tocar en grupo. Gracias Esteban.
Y, por último, la formación de Aida y de Carmen, fundamentales para que el proyecto que estamos construyendo salga adelante.

Valoración del grado de ejecución de las actuaciones planificadas en cada aula

En general, noto a mi alumno con mayor motivación. La hora de clase, la tengo dividida en dos medias horas: una destinada a la parte más tradicional del estudio de un instrumento y la otra a aspectos que estoy aprendiendo en este proyecto. A él le encanta la segunda media hora: improvisar, sacar canciones de oído, armonizarlas, transportarlas, cantar¿ Y eso me transmite un aprendizaje mucho más natural, usando la memoria musical sin apenas esfuerzo y liberándonos de la barrera de la partitura, potenciando el oído y, en definitiva, aprendiendo con sentido.

CONJUNTO DE ACTUACIONES IMPLEMENTÁNDOSE EN EL PROYECTO
Completando este punto, adjunto en el apartado ¿Recursos¿ los arreglos y transcripciones realizados en formato pdf y sibelius para que cada uno de nosotros pueda disponer de ellos o imprimir partes sueltas, audios¿

VALORACIÓN DEL GRADO DE EJECUCIÓN DE LAS ACTUACIONES PLANIFICADAS PARA EL CENTRO
- Audición primer trimestre.
Tocar en grupo, que la música sea una experiencia de cooperación y que permita compartir vivencias es lo más positivo de esta nueva manera de hacer audiciones¿ o más bien actuaciones: lo más bonito que se vio en aquella primera actuación fue que el alumnado se sentía partícipe como un todo, no había nervios sino un sentimiento de equipo, de que pasara lo que pasara había que continuar porque lo que estaban haciendo les motivaba. Sin embargo, de cara a futuras actuaciones nos planteamos que poco a poco los temas, las canciones u obras puedan llegar a tener una forma más definida, un desarrollo más allá de tocar y cantar las melodías.

- Curso de formación con Aida Marín. El curso, y la ponente, fue estupendo. La manera en que nosotros, los profesores del proyecto, nos acercamos a músicas populares, de carácter oral, podría mejorar. Si comparamos la manera de Aida a la hora de enseñar los temas con la nuestra difiere en algo clave: ella creía vivamente en lo que cantaba, sabía la letra, su estructura, la contaba como una historia interesante y motivadora para quien la escuchaba activamente. Nosotros en muchos casos nos olvidamos que la música vocal en una primera fase es fundamental para conectar el lenguaje hablado (que ya conocen los alumnos) con el lenguaje musical (algo todavía desconocido para ellos). Elementos musicales como la armonía, cadencias musicales, textura, las dinámicas, articulaciones y como unión de todo ello, la forma, están plenamente relacionados con la forma y el contenido del texto. Propongo que en un futuro podamos partir de nuestras propias canciones populares, que también nos serán más cercanas a nosotros los profesores a la hora de ser cantadas y arregladas, como proponen Bartók o Kodaly.

VALORACIÓN DEL GRADO DE EJECUCIÓN DE LAS ACTUACIONES PLANIFICADAS EN CADA AULA
Comparto con mi compañero Benjamín la necesidad de que haya pequeños líderes organizativos que dividan y simplifiquen las cuestiones de carácter burocrático. En las reuniones de trabajo se emplea un tiempo excesivo en cuestiones burocráticas que podrían ser resueltas sin necesidad de quedar, si hay una persona responsable de poner en común esas cuestiones. Podríamos aprovechar ese ¿tiempo precioso¿ en que nosotros, los profesores, fuéramos realmente otro equipo, como ya demostraron los alumnos. Aprender todos de todos. Seguro que se nos ocurren ideas maravillosas entre todos, pero echo de menos estar en contacto directo con la música.

Una propuesta de ¿líderes participativos¿:
- Coordinación del proyecto y de colabora (Carmen Barberá)
- Planificación del temario de lenguaje Musical por trimestres (Carmen Inés y Carmen Barberá)
- Planificación de horarios para ensayos, actuaciones, reserva de espacios (Begoña)
- Creación de arreglos y adaptación de los mismos a las necesidades técnicas e idiomáticas de los instrumentos para que no se pisen instrumentos tan diferentes como la flauta y el contrabajo y puedan desarrollar sus capacidades de forma adecuada (Julia)
- Creatividad e improvisación (Antonio, Esteban¿).

Yo emplearía en lo posible los encuentros, más que reuniones, en experimentar nosotros mismos, con los instrumentos siempre disponibles, para luego transmitir a los alumnos nuestra experiencia vital.

Para mi , la valoración de este grupo de trabajo es muy positiva , tanto la formación que estamos adquiriendo en los cursos , como la aplicación de las nuevas herramientas de trabajo en él aula con el alumnado ,supongo que cada profesor utilizará los recursos que mejor le vallan a su especialidad y a cada perfil de alumnado en concreto . Yo en particular estoy aplicando que el alumno cante la obra antes de afrontarla con el instrumento (Willens) y del curso con Aida ,no sobrevalorar la partitura , es una herramienta más ,entonces se puede empezar a preparar una obra oyéndola primero , poniéndosela de oido al alumno (tradicion oral ) y luego ver en la partitura como se traduce en signos ,dicha obra .esos son los recursos que mejor se adaptan a mi especialidad .
El grupo de trabajo muy bien en todos los aspectos , la programación de los cursos , elección de los ponentes ,aportaciones de los mismos compañeros .valoracion muy positiva

Por lo general, las formaciones recibidas están siendo muy interesantes y enriquecedoras.
Por mi parte, como docente, estoy adoptando nuevas estrategias, recursos y herramientas para el desarrollo de habilidades de mis alumnos.
Por parte de los alumnos, observo que reciben con motivación lo que se les enseña en clase y compruebo el desarrollo de el oído, la capacidad de tocar en grupo, el desarrollo de la memoria musical, etc.
Por ahora, la valoración es positiva, tanto de la formación como de su aplicación en e aula.
Seguiré desarrollando estos recursos aprendidos durante el curso a la espera de nuevas conclusiones.

Hola a todas/os. Voy a ser breve, porque me resulta difícil comentar algunos de los puntos, ya que no tengo alumnado metido en el proyecto (y a que estoy en un vuelo (esto último no aporta nada, solo deciros a todos que estoy de viaje, y vosotros no..).
En cuanto a los primeros puntos, la verdad es que uno de los elementos clave del proyecto es precisamente la puesta en común y coordinación sobre los contenidos. Quizá sobre este punto, el problema fundamental es que hay que conseguir que esto se haga de forma sostenible. Es decir, sin que suponga una reunión semanal, tanto desconcierto por parte de todos hasta que se deciden y sin que el trabajo del profe de instrumento se vea tan radicalmente alterado. Si bien es verdad que el segundo año será más rápido que el primero, quizá podría resultar más efectivo no pretender TANTOS materiales comunes. Quizá más eficaz decidir unos materiales mínimos comunes (los que se trabajan en lenguaje) y luego dar libertad a los profes de instrumento para que trabajen su propio material, pero cuidando mucho los contenidos que se tratan, así como la terminología empleada. Tambien podría ser útil tener a disposición una batería de materiales y libertad para decididir cual es el que mejor se adapta al instrumento. De este modo prodria dejarse la música en grupo para determinados momentos, por ejemplo una vez al trimestre. Se prodría optar por montar una pieza trimestral de forma parecida a como se hizo (o se intentó) lo del blues.

De forma concreta sobre el ¿taller de blues¿ tengo varias cosas que comentar, ya que es donde sí he estado directamente implicado con los alumnos:
En primer lugar, agradeceros a todos la ayuda prestada durante las sesiones. La verdad es que tener a tanto profe mirando me suponía cierto nivel de estrés, pero lo hizo todo más fácil.
El tiempo disponible (al igual que me ocurrió la primera vez que hice esto) no dio margen a la improvisación. La verdad es que en mis planes tampoco había mucho margen de tiempo para dedicar a la improvisación con la escala. Ese sería un trabajo para una segunda sesión. El objetivo principal era tocar desde cero algo en grupo sin seguir una partitura.
La critica principal que me hago es que, debido a la falta de tiempo y al ansia de resultados, la forma de acceder fue absolutamente precipitada y creo que muchos de los alumnos lo hicieron por inercia, sin entender muy bien lo que estaban haciendo. Esa fue mi percepción.
Quizá es necesaria más planificación por mi parte y por supuesto, más experiencia en este tipo de situaciones con estos instrumentos.

En cuanto a la formación, la que hemos hecho hasta ahora me ha parecido muy enriquecedora. Creo que es fundamental profundizar en la formación. Tengo la misma sensación que casi siempre con estos temas: muy bien, ya se como abordar las primeras sesiones, ¿pero que hago en la sesión 40? ¿Cómo sigo enseñando de forma coherente con esta forma de trabajo cunado avanzo un poquito?

Buenas a todos!
Voy a intentar exponeros mi visión. Visión no muy amplia, por desgracia, aunque también por fortuna, debido a las circunstancias personales que todos conocéis.
Para empezar, deciros que me ha gustado mucho leer vuestros comentarios. Nunca quise trabajar en un conservatorio, hasta que las circunstancias me abocaron a ello y me rendí. Desde que trabajo en él he ido persiguiendo ¿algo¿ y ese ¿algo¿ es lo que estoy viendo que está pasando en este proyecto. Así que estoy encantada de estar rodeada de compañeros que tienen esa misma ilusión: profes comprometidos con la educación y con la música. Profes que sienten un gran respeto por sus alumnos.
Dicho todo esto empiezo del último punto al primero.
No tengo alumnos así que no puedo comentar nada en primera persona sobre la aplicación real en el aula, aunque me gusta corroborar, en los comentarios ajenos, las intuiciones que nos han llevado a buscar un nuevo sistema de enseñanza. Cantar, vivenciar, secuenciar según la madurez del alumno, integrar y coordinar las diferentes especialidades parecen que son buenos planteamientos.
Sobre las actuaciones planificadas por el centro creo que me han sabido a poco, también debido a mis circunstancias personales, hay que decirlo. Tengo sed de aprender, pero sobre todo de aprender a mirar de otra manera. El curso con Aída, así como la formación con Carmen me han dejado con el apetito abierto. Todavía nos quedan actividades programadas para este curso pero creo que debemos seguir recibiendo formación. Es fundamental.
Me gustaría aprovechar este espacio para comentar lo que veo desde mi posición.
Creo que tenemos que buscar un sistema más operativo de organización. La coordinación es la clave de nuestro proyecto, pero hay que buscar la operatividad y la eficiencia. Si queremos mantener esta linea de trabajo a lo largo del tiempo, y que la plantilla de profes aumente, no puede suponer tanto coste. Ha pasado que para una semana se ha marcado unos puntos de trabajo y luego no se han visto hasta muchas semanas después. Aunque esto es normal también, es el primer año y tenemos que aprender.
Quizás plantearnos una reunión larga, ¿colosal¿, dónde se haga una planificación trimestral y luego alguna pequeña reunión ya para cosas concretas. Sólo es una idea. De cara al futuro es importante que cada profe que este año esté trabajando con alumnos guarde la secuenciación del trabajo, para que el próximo curso sea algo más fácil pero sobre todo para fijar los ejercicios, piezas, etc que funcionen y así ir dejando un material de cara a los profesores nuevos que puedan ir incorporándose e ir asentando este modelo de enseñanza aprendizaje. Hay que buscar y pensar en la sostenibilidad para intentar ir sumando cursos. Luego ya pelearemos con el resto de cuestiones logísticas.
También con otra organización podemos dejar sesiones de reunión sólo para debatir. Quedan cuestiones importantes por decidir: ¿hasta dónde vamos a seguir rompiendo con la enseñanza tradicional? ¿Por dónde seguir? ¿Proyectos?, etc
Tenemos que buscar un sistema donde sea fácil la comunicación entre nosotros, que los materiales perduren de un año a otro y no nos suponga una carga de trabajo excesiva. Ahora mismo estamos con muchas ganas, pero un nivel alto de esfuerzo durante muchos años es difícil de mantener, por no hablar de posibles cambios en la plantilla o incorporaciones nuevas.
Bueno, gracias a todos por vuestro trabajo, implicación, ganas y buen hacer.
Gracias por sembrar esta supersemilla, que esperemos que nos ayude a conseguir nuestros objetivos como docentes y como músicos

Conjunto de actuaciones implementándose en el proyecto

Considero que dos de los pilares básicos para el funcionamiento de este proyecto son la formación y la coordinación entre el profesorado.
La formación aportada por Carmen sobre cómo afrontar la iniciación al lenguaje musical desde la perspectiva de la metodología Willems así como la lluvia de ideas y recursos en aspectos como la improvisación, el movimiento, la armonía y el trabajo a varias voces aprendidos en las sesiones impartidas por Aida han resultado fundamentales en el punto de inicio del proyecto y estoy de acuerdo con mis compañeros en que es necesario continuar adquiriendo herramientas y puntos de vista nuevos para encontrar el camino más adecuado en el desarrollo de aspectos como la improvisación o la creación en Enseñanzas Básicas. Es un requisito fundamental para que nuestros ideales de mejora se materialicen en actuaciones concretas con una base sólida.

La experiencia y conocimientos de otros compañeros han sido también muy enriquecedores en este aspecto formativo, ya que además de aportar ideas en la metodología de aula han derivado en proyectos como el taller de blues, que aúna varios de los puntos que pretendíamos desarrollar este curso: sencillas improvisaciones, la interpretación en conjunto y sus diferentes planos sonoros (acompañamiento-melodía-improvisación), la capacidad para seguir estructuras armónicas, la superposición de ritmos aprendidos, etc.

A todo esto hay que añadir la coordinación del profesorado que posibilita consensuar los objetivos y contenidos comunes a alcanzar paralelamente en el lenguaje musical y el instrumento y trabajar desde perspectivas metodológicas consensuadas y secuenciadas de forma conjunta.


Valoración del grado de ejecución de las actuaciones planificadas para el centro

La realización de la audición conjunta fue muy positiva ya que conseguimos poner en común lo trabajado de forma paralela y transversal durante el primer trimestre y tanto los participantes como el público quedó satisfecho con el resultado obtenido.

En este segundo trimestre hemos querido ir un paso más allá buscando realizaciones de arreglos más complejos que incluyeran varias voces, acompañamientos con percusión corporal, pequeñas coreografías, etc. En esta búsqueda nos hemos topado con dificultades para ponernos de acuerdo especialmente en la concreción de los arreglos. Después de la reflexión que realizamos hace algunas semanas llegamos a la conclusión de que el error principal ha sido pretender comenzar por el final del proceso, basándonos exclusivamente en la elaboración de algo escrito para la audición, dejando a un lado los objetivos de aprendizaje que nos habíamos marcado. Propongo como idea determinar algunos patrones de acompañamiento y de bajo basados en el trabajo sobre funciones tonales e intervalos que estamos haciendo, que sean aplicables a varias canciones y que se puedan superponer fácilmente y trabajar en clase como refuerzo del concepto de acorde y tonalidad. Después será mucho más sencillo distribuir la estructura de las voces, sabiendo que todos son capaces de hacer algunos de estos patrones.


Valoración del grado de ejecución de las actuaciones planificadas en cada aula

En el aula de fagot no se ha trabajado con alumnos de 1º, sino con alumnos de 2º, con lo cual, la coordinación con lenguaje musical no ha sido tan explícita aunque se ha procurado adaptar al nivel actual.

En esta clase participa una alumna flexible, intuitiva y con buenas aptitudes musicales y otro alumno con dificultades para la entonación, propenso a una excesiva comprensión cerebral de los planteamientos que surgen en clase y un nivel de absentismo más elevado de lo habitual en mi asignatura. A lo largo del trabajo de este curso he visto como la entonación ha mejorado en ambos sensiblemente, no se ha producido prácticamente ninguna falta de asistencia, se les ve implicados y receptivos cuando se presenta una nueva canción o ejercicio trabajado sin partitura, poco a poco se está consiguiendo mejorar el tiempo de memorización y montaje del repertorio planteado y la intuición musical para la realización de fraseos o la construcción de pequeñas improvisaciones propias ha ido creciendo desde el año pasado.

En contraposición, como han expresado ya algunos de mis compañeros, también me encuentro con dificultades relativas normalmente a la sensación de falta de tiempo para realizar todo lo planteado sin dejar de lado el trabajo técnico de la respiración, notas tenidas, escalas, etc. Supongo que esto es debido a que el aprendizaje de oído y de memoria requiere mayor tiempo de dedicación al montaje de las canciones, aunque finalmente conseguimos una mayor interiorización de todos sus elementos. Por otro lado, ya que mis alumnos están en segundo, considero también importante que sigan practicando la lectura tradicional de la partitura ya que el año que viene se enfrentan a asignaturas como agrupaciones musicales donde tienen que ser capaces de leer partituras por sí solos. En este aspecto aunque hemos leído mucho menos repertorio que el curso anterior siento que han adquirido una buena dinámica para comprender a través de la entonación previa, los elementos musicales que aparecen en la partitura.

Como valoración principal, me gustaría destacar positivamente el trabajo de todos con un objetivo común, que se va perfilando y materializando en las distintas reuniones, siendo estas uno de los aspectos más enriquecedores del proyecto.
La formación externa ha sido de gran valor, pero coincido con Sara en lo interesante de acotar los contenidos trabajados y profundizar sobre los mismos, a fin de dominarlos y ponerlos en práctica en el aula de una manera más eficiente.
Haciendo una valoración general, el resultado en la parte que abarca la motivación, el entusiasmo y el interés del alumnado es bastante positivo. En mi caso particular, el planteamiento ha sido una mezcla de la línea de trabajo marcada en el proyecto con los aspectos que considero más interesantes de la técnica instrumental, dando como resultado alumnos con un desarrollo técnico correcto, pero con una formación musical más completa.
Para sacar unas conclusiones más concretas habría que esperar al final del curso y valorar de forma global el resultado del proyecto en mi aula, comparándolo con años anteriores.

Creo que es un hecho conocido que enseñanza de la Guitarra Flamenca tradicionalmente ha sido de forma oral, es decir, totalmente exenta de partituras en la que el alumno aprende puramente por imitación (por modelaje) de su maestro. Por una parte se aprenden los diferentes Toques o Palos compuestos por falsetas, que vienen a ser como las variaciones y a su vez entre las falsetas se ponen en práctica una serie de patrones que podríamos llamar clichés, que normalmente caracterizan al Toque. Estos clichés es digamos la parte que un guitarrista flamenco "improvisa", y lo digo entre comillas para que se entienda que no es una improvisación "real" la que realiza un guitarrista flamenco tradicional, si no una serie de recursos que conocemos y aplicamos ya sea de una forma consciente o no.

¿Por qué menciono todo esto? Pues bien, como podréis deducir con lo expuesto, la metodología de la enseñanza de Guitarra Flamenca en el ámbito del Conservatorio ha tenido que cambiar sustancialmente para adaptarse a la institución. Con todo lo que estáis exponiendo, compañeros, veo bastante claro algo curioso: que aparentemente caminamos en direcciones opuestas. Pero que no se interprete mal, me refiero a que en parte, estáis buscando "salir" de la partitura mientras nosotros pretendemos "entrar". Es decir, vosotros tenéis la experiencia del estudio con partituras y nosotros (Guitarra Flamenca) tenemos la experiencia de la tradición oral, con las ventajas e inconvenientes que cada una de las metodologías conlleva.

La adaptación mencionada anteriormente sobre la entrada de la Guitarra Flamenca en el Conservatorio nos ha obligado al profesorado de mi especialidad a poner en práctica una metodología de la enseñanza del instrumento que nos resultaba casi totalmente nueva, en el sentido de tener que compaginar la tradición oral con los estudios formales que exige el Conservatorio. La circunstancia encontrada es en definitiva que nuestros maestros nos formaron desde la tradición oral y nosotros comenzamos a leer partituras en muchos casos con mucha posterioridad a tener contacto con el instrumento.

Por todo ello las sesiones de formación de Carmen Barberá y de Aída Martín me han recordado o hecho reflexionar, pues veo que muchas de las actividades propuestas de alguna forma buscan esa intuición musical y espontaneidad que se pierden en un sistema de enseñanza que de alguna forma con el tiempo se ha "radicalizado en las partituras" en exceso perdiéndose el desarrollo de otras muchas cualidades que ha de tener un músico.

A mi entender por tanto, sería bueno encontrar un punto intermedio en el que cualidades del músico de tradición oral como son la memoria el oído o la intuición estuvieran integradas en nuestras enseñanzas en la justa medida. La verdad es que aplaudo y admiro esta iniciativa que estáis teniendo con este plan de formación ya que no es nada sencillo, pero sinceramente creo que es algo realmente necesario y vale la pena. Mucho ánimo a todos los integrantes.

En una ocasión hace varios años trabajé en una colaboración con el director y compositor cubano Norman Milanés y le pregunté: ¿qué tal con los músicos de las orquestas y bandas con los que estás trabajando ahora en España?, su respuesta fue "bien, aunque en gran parte más que músicos son lectores, es el problema que tenéis en este país con vuestro sistema de enseñanza".

Conjunto de actuaciones implementándose en el proyecto.

Para mí, coincidiendo mayoritariamente con el resto de mis compañeros del proyecto y teniendo en cuenta que este proyecto arrancaba a principios de curso como algo novedoso en nuestro centro y para los profesores que conformamos el proyecto, pedagógicamente hablando, suponía comenzar con algo que no sabíamos cómo iba a ir resultando, aunque sí teníamos buenas referencias de que líneas metodológicas parecidas que tomábamos como referencia, habían tenido ya buen resultado anteriormente. Aun así, tengo que decir que me ha sorprendido gratamente los resultados y el avance obtenidos en mis alumnos de trombón en general, gracias a la aplicación tan práctica y vivencial de esta nueva línea metodológica y a la buena planificación y temporalización de los contenidos recogidos en las canciones que acordábamos entre todos, profesores de lenguaje musical e instrumento, sobre todo en el primer trimestre. Además, he observado una clara diferencia a mejor con respecto a alumnos de otros años del mismo curso, en aspectos como la capacidad de memorizar, la rapidez con la que asimilaban y llevaban al instrumento las canciones y melodías que trabajábamos en las clases, siempre reforzadas cantándolas para interiorizarlas en la clase de instrumento, con la letra previamente y luego con las notas musicales. Todo este divertido a la vez que pedagógico trabajo para ellos se vio materializado con una estupenda audición conjunta en la que los alumnos se adaptaron perfectamente para ensayar las piezas, poniendo en práctica también el concepto de ¿ensayo conjunto¿, algo que a priori parecía impensable de coordinar para alumnos de 8 añitos; tocar cada uno según su especialidad en su turno durante cada canción, sabiendo esperar y cuando tocar, cantar las canciones con sus letras, trabajando la memoria(aspecto este tan importante para un músico), escucharse entre todos trabajando la afinación y el tempo,etc.
Sí he notado que la lectura en algunos alumnos no ha ido tan rápida como otros años en alumnos de primero de básicas, en cambio en otros alumnos ha ido sin problemas, entonces esto me da lugar a reflexionar, al no ser algo generalizado sino más bien puntual de dos alumnos, para los que les cuesta más leer ahora mismo una partitura, pero en poco tiempo estamos convencidos de que lo harán sin problemas y prácticamente sin esfuerzo, ya que lo principal y primer paso es oir la música internamente y eso lo hacen constantemente, y así la música escrita será una guía con la que seguir la lectura de una partitura simplemente, habiendo previamente trabajado la música internamente cada uno en su cabeza. Esta es la base de esta nueva metodología que nos está dando tan buenos resultados.
Para toda esta coordinación del trabajo nos fue fundamental formarnos en campos como las nuevas metodologías en la enseñanza musical o la metodología Willems, con el fín de obtener herramientas para el trabajo en clase con el alumnado como hicimos durante el primer trimestre.
Respeto al trabajo y organización del segundo trimestre, en la cuestión de preparar la audición que iba a hacerse en un principio en abril, he de decir que quizás nos hemos visto algo colapsados de ideas aportadas por todos y ha faltado quizás concreción y una línea a seguir más simplificada y no tan compleja para niños de ocho años. Creo que esto es un proceso a medio-largo plazo y aunque pensemos que los niños de 8 años son como esponjas y no tienen problemas para entender y asimilar prácticamente nada, tampoco podemos ir mucho más allá de sus capacidades puramente intelectuales que corresponden a su edad. De ésto creo que hemos aprendido todos los profesores implicados en el proyecto y por eso hemos cambiado y tomado algunas decisiones que creo van a hacer que lo que queda de curso sea aún más fructífero de lo que se ha hecho y conseguido hasta ahora, que ya lo ha sido y mucho, en mi opinión. Para mí particularmente, y en mi especialidad que es trombón, agradezco que se haya modificado la temporalización de contenidos a trabajar en las clases rebajando el nivel de estrés en las sesiones de trabajo, y se haya dejado más tiempo para preparar la próxima audición porque sí notaba últimamente que no encontraba tiempo en las clases para trabajar aspectos técnicos tan básicos e importantes como la respiración, la calidad de sonido(haciendo notas largas), la afinación con la vara(algo tan delicado en el trombón y a lo que hay que dedicar y corregir tanto en los niños) o la posición corporal en al tocar.
Yo particularmente en el curso de formación de nuevas metodologías en la enseñanza de la música que tuvimos en el primer trimestre, hubiese preferido quizás menos número de ejercicios-canciones y profundizar más sobre cada uno, pero es sólo una apreciación personal, que no desvalora en ningún sentido la calidad del curso de la ponente que lo llevó a cabo, Aida. Fue muy bueno este curso!
El taller de blues llevado a cabo por nuestro compañero Esteban para los alumnos, en el segundo trimestre, ha aportado una nueva visión de la armonía y colores distintos en la música desde ya pequeños a los alumnos, en el que se desglosaron las tres voces básicas de los acordes de una progresión de blues standard, trabajando los grados, con sus tensiones incluidas y cada grupo de instrumentos tocaba una voz, adaptándose y comprendiendo muy bien estos nuevos conceptos.

Valoración del grado de ejecución de las actuaciones planificadas para el centro

Normalmente tenemos diseñadas las sesiones de trabajo previamente y el material que vamos a trabajar, aunque como he comentado antes, al ser todos los contenidos que hemos trabajado básicamente desde principios de curso tan ¿musicales¿ con melodías y canciones, lo cual es muy positivo, a veces me ha faltado tiempo para lo que otros años he trabajado siempre tanto, que son aspectos más técnicos como la respiración, la calidad de sonido, la afinación, etc. Pero he de decir también que me estoy adaptando bien y últimamente sí encuentro más tiempo para trabajar en la clase estos aspectos que nunca deben dejarse de lado; lo cual me hace estar más contento y ver mejores resultados en todos los ámbitos, técnicos y musicales, en mis alumnos.