Después de una travesía, con sus luces y sus sombras, seguramente por novedoso,del Programa PRODIG durante este primer curso de existencia, hay que decir que la renta para nuestro Centro ha sido positiva. Ha servido para marcar nuestro punto de partida tanto personal como grupal en lo que a competencia digital se refiere. También hemos tenido presente qiue la digitalización debe abarcar los tres ámbitos tratados en el Programa teniendo su autonomía propia sin poder descuidar uno respecto a otro. Comenzamos una formación en este sentido que seguramente en cursos posteriores deberíamos intensificar y sobre todo nos ha hecho centrarnos en el uso de las herrmientas que se ponen a nuestra disposición desde Séneca y que será punto de partida para el próximo curso.
Ya solo queda esperar que el próximo curso continuemos con esta interesante travesía que deberá de llevarnos a buen puerto.