Durante este curso pusimos en práctica todo lo llevado en el anterior. Lo alumnos/as empezaron a disfrutar de una forma diferente de trabajar. Teníamos mucha ilusión por crear nuestro cuaderno de estilo y comenzar la oralidad, aspectos muy importantes y relevantes en nuestra comunicación lingüística. Como tutora de 6º, le puse muchas ganas, para que este alumnado llevara por lo menos una pincelada a su nueva etapa, la secundaria. Todo se ha visto truncado y lo que es peor, nos hemos dado cuenta de las dificultades reales de nuestra educación. No solo el alumnado necesita formación, también las familias. Hemos comprobado el déficit que tanto ellas como nosotros presentamos en aspectos como la cultura digital, herramienta que ha sido clave en esta forma de aprendizaje. Esperemos, que la administración apoye con más recursos a esta educación pública, que con tanta ilusión defendemos.
El próximo curso, y si las circunstancias lo permiten, reanudaremos nuestro trabajo donde lo dejamos y procuraremos aplicarlo en nuestro alumnado. Un saludo para todos/as.