Buenas.
Me siento muy agradecida por todo lo que nos aportó Ana.
No sólo material, recursos y sus vivencias, su tiempo... También y primordialmente su encomio y sus ánimos.
Hasta ahora mi línea de trabajo ha sido esa.
Comenzar la clase con un saludo, expresando con gestos como nos sentimos ese día e interactuar en función de ello.
Procurando intervenir lo mínimo posible en la resolución de conflictos e intentando que sean conscientes de sus propias emociones y expectativas y también las de la otra u otras personas implicadas en el conflicto.
Por supuesto todas estas medidas mejoran la adquisición de sus aprendizajes ya que el Clima de la clase en comparación con el inicio de curso ha mejorado. Les es más fácil y rápido autocontrolarze y centrarse.
Sin embargo cómo ya refleje en mi primera intervención sigue siendo muy complicado hacer grupo cuando vienen con creencias desde casa que están en contradicción con ser todos del mismo grupo.
Tomando el consejo de Ana que comentó que hasta los 30 años son moldeables estas estructuras mentales seguiré adelante con el mismo cariño y empeño.