Buenas tardes a todos/as los y las compañeros/as:

En primer lugar, quiero agradecer a nuestro coordinador y compañero Martín su excelente presentación de nuestro grupo de trabajo porque, sobre todo, nos sirvió para recordar lo aprendido el pasado curso y poner al día nuestros conocimientos sobre la materia. 

Por otro lado, quisiera hacer algunas observaciones sobre la entrevista realizada al psiquiatra y ensayista Rafael Manrique. A este respecto quisiera descatar lo siguiente:

1. Me parece muy interesante que plantee, de entrada, la cuestión de si sería suficiente una inteligencia a secas. En realidad, como él mismo nos aclara más adelante, se trata más bien de diferentes inteligencias o momentos de inteligencia. No puedo estar más de acuerdo con ambas aseveraciones. 

2. La definición de IE como " una construcción social reciente que ha nacido en el marco del neoliberalismo y de las nuevas necesidades del mercado laboral", es, creo más discutible. Sin embargo, teniendo en cuenta que esta definición busca cuestionar conceptos como el de CI (coeficiente de inteligencia) no me resulta tan alejada de cierta tendencia actual al cuestionamiento de diversos conceptos que no busca otra cosa que una determinada alienación. 

3. En relación con lo anterior está lo que se dice de la IE: " La IE es un procedimiento para la adaptación, entrenamiento y obediencia de mandos y profesiones intermedias para crear personas maleables y poco conflictivas¿. Es este aspecto más discutible, creo. Sin embargo, el propio autor redunda en esta idea más tarde cuando añade: ¿ La IE nunca se plantea problemas políticos, sindicales, de discriminación por género,...¿. Cualquier conocimiento o disciplina debe llevar aparejados siempre la posibilidad de reflexión crítica acerca de su propia naturaleza.

   4. Estoy muy de acuerdo con el autor cuando habla de una ¿ inteligencia emocionalizada y una emoción intelectualizada¿. En realidad, creo que nuestro trabajo como docentes debe dirigirse en gran medida a que nuestros alumnos aprendan a desarrollar conjuntamente estos aspectos. Naturalmente, como docentes tenemos un trabajo previo con nosotros mismos.

   5. Por último, no quisiera dejar de mencionar la crítica que este autor lanza sobre el hecho de que mucha de la formación que se está llevando a cabo en este campo aparece financiada por diversas entidades bancarias. Parece querer advertirnos de los intereses ocultos que esos agentes interesados pueden perseguir. Sobre este particular no puedo dejar de sentir cierta inquietud como docente toda vez que, como se recalca en la entrevista, este conocimiento puede ser utilizado no para desarrollar distintas capacidades en los individuos sino, más bien, para anularlos como tales en sus vidas.

   6. En resumen, una entrevista muy interesante que ofrece un punto de vista distinto sobre la IE y su posible evolución en nuestra sociedad.