El desarrollo de la Formación en Centro planteado para el presente curso no se ha realizado como en principio deseamos y teníamos previsto.
Por un lado han surgido desde el inicio diferencias importantes respesto a las expectativas de los participantes y por otro respecto al momento de aplicación práctica. El "miedo" o la inseguridad que da la inexperiencia hacen que no se vea nunca el momento idóneo para iniciar de manera práctica el cambio metodológico al que aspiramos, buscamos una formación previa que nos de seguridad, pero por mucha formación que se reciba, si no se aplica al aula y vemos sus resultados reales, no comprobamos su utilidad y continuamos sin sentirnos seguros.
Entiendo que es muy difícil el cambio, pero tratar de combinar el sistema de trabajo tradicional con la formación actual y buscar huecos donde tratar de desarrollarlo, hace que sea todavía más difícil y notemos que nos faltan horas y días de dedicación para encajarlo en nuestro horario semanal.
Pienso que debemos continuar formándonos para adaptarnos a la normativa lo antes posible, tendremos que arriesgar y no temer tanto los errores que de forma inevitable llevan consigo todos los procesos de cambio. No es posible hacerlo bien a la primera.
Este curso no hemos podido concluirlo debido a las recomendaciones sanitarias por el COVID-19 y el próximo curso estará también influenciado. Desconocemos cómo se desarrollará, pero la formación, ya sea presencia o a distancia será necesaria para nuestro claustro.