Tras finalizar el periodo de formación en el centro, es hora de reflexionar y transmitir los resultados a través de experiencias desarrolladas día a día en nuestro centro. Mi trayectoria en el centro es corta, pero no hace falta indagar demasiado en su historia para darnos cuenta que es un colegio con esencia y dispuesto a responder a las dificultades que se van presentando. Es por ello que surge la idea de llevar a cabo la formación Divertirecreos como medida de respuesta a los conflictos presentes en el recreo.

         A mi parecer, unas de las evidencias más positivas de la formación es la iniciativa por parte del alumnado de la etapa de primaria de amenizar los recreos de la etapa de infantil. Ellos, por iniciativa propia y de forma voluntaria, han organizado actividades como juegos, pintura de cara, cuentos, bailes¿Hecho que repercute positivamente en ambos niveles por las interrelaciones que se desprenden de estos tipos de experiencias.

        Por otro lado, nosotros como docentes hemos organizado distintas actividades. Para ello hemos establecido distintos espacios asignándole una función concreta a cada uno. 

De este modo, a los niños y niñas se les ofrecen distintas alternativas para disfrutar de un tiempo tan enriquecedor como es el recreo por las posibilidades que ofrece esta franja horaria:

• De Socialización: Cada alumno/a opta libremente con qué o con quién quiere jugar o pasar su tiempo y así va estableciendo lazos.
• De Inclusión: Además, se ofrece la oportunidad de participar a aquellos escolares que, por sus circunstancias personales (timidez, discapacidad, etc),  necesitan desarrollar estrategias para sentirse partícipes de un grupo de iguales.

Para concluir, decir que esta formación nos ha dado la oportunidad de enfocar los recreos desde otra perspectiva. Un nuevo enfoque que ha convertido esta franja horaria en espacio de aprendizaje para un desarrollo integral de los niños y niñas.