En el tercer trimestre hemos dedicado menos tiempo al proyecto, debido, principalmente, a la falta de tiempo para acabar el contenido programado para el presente curso académico. Durante los dos primeros trimestres, el proyecto ha sido uno de los ejes principales del proceso de enseñanza-aprendizaje de la materia Ciencias Sociales, como lo demuestra los trabajos realizados por el alumnado. Estos fueron expuestos durante la visita de la embajadora de Rusia.
La principal dificultad que hemos encontrado ha sido precisamente la falta de tiempo para profundizar en los aspectos geográficos e históricos de los países seleccionados, ya que muchos de dichos aspectos demandaban una explicación más detallada por parte del profesor.
En cuanto a la parte más positiva del proyecto ha sido que el alumnado se ha dado cuenta que los contenidos aprendidos en el aula tienen una aplicación práctica cuando vemos fotografías de paisajes de otros países, viajamos o visitamos el patrimonio artístico.
Considero que estos proyectos serían más fructíferos si no tuviéramos la "presión" de impartir un contenido tan amplio como el de Ciencias Sociales de 1º ESO, del cual el alumnado desconoce cuestiones relevantes. Igualmente, el docente debe atender a la diversidad de grados de aprendizaje que se da entre el alumnado y programar las tareas para cubrir dicha necesidad. En síntesis, impartir contenido, dedicar tiempo a los alumnos/as con dificultades y atender al proyecto a veces se convierte en una tarea ingente y, por ende, difícil de alcanzar con un nivel de eficacia adecuado.