Por mi parte, y al igual que en el grupo de trabajo, me comprometo a llevar a cabo todas las tareas asignadas por Jose en el proyecto lo mejor posible y de forma puntual. La necesidad de llevarlo a cabo me parece evidente teniendo en cuenta, como bien dicen mis compañeros, que una parte muy importante de nuestra labor se centra en la evaluación (por suerte o por desgracia), y que lo que todos queremos es tener la tranquilidad de que las pruebas que utilizamos para ello son pertinentes y evalúan exactamente lo que pretendemos.
Entiendo que esta formación, contrariamente al grupo de trabajo, lleva consigo un trabajo de profundo análisis y debate en los que no siempre será fácil llegar a las mismas conclusiones por parte de todos los componentes del grupo, pero espero que consigamos al final de este proyecto (y aunque sólo sea en nuestro centro) ver de forma más homogénea todo lo referente a elaboración de tareas y su correcta aplicación.
Como directora (y aunque no venga al caso) quería comentar que estoy muy ilusionada con el espíritu y la actitud del claustro con el que contamos en este curso, de los que, entre otras cosas, nacen estos dos proyectos de formación. Es un lujo con el que desgraciadamente no siempre se puede contar. Además, trabajar por mejorar lo que ya está hecho tiene para mí un mayor valor y mérito incluso que crear algo nuevo, porque desde luego no es la opción más cómoda, pero sí la que denota mayor profesionalidad en un equipo. Supongo que la unión de las características particulares de cada uno unidas han dado lugar a este bonito fenómeno.
Seguro que el que los objetivos de esta formación en centro coincidan con una de nuestras propuestas de mejora para este curso hará que la implicación de todos sea mayor.
Perdón por alargarme, pero tanto al oral como por escrito, me cuesta parar ¿.