Fecha de publicación 21/03/17 18:28
Creo haber aprendido a programar incorporando las tareas a mi labor educativa. Considero que, en última instancia, esta forma de programar no supone un esfuerzo añadido excesivo. En lo que sí he notado más dificultad es en la manera de cambiar la mentalidad de estudio memorístico-especulativa de los alumnos y convencerles de la necesidad de cambiar el rumbo hacia una mentalidad más pragmática, basada en el trabajo en tareas y con una perspectiva mucho más abierta al trabajo cooperativo. Respecto de la incorporación de las rúbricas como sistema de evaluación y de ponderación del trabajo cotidiano de los alumnos creo que necesitamos, como equipo docente, dotarnos de herramientas más eficaces y adaptadas a las necesidades de cada área aunque, en lo esencial, sean comunes a todos y útiles para ayudar a evaluar a nuestros alumnos en las múltiples facetas y competencias a las que atendemos. En todo caso, creo que hemos hecho un esfuerzo notable por incorporar las rúbricas a nuestra práctica educativa y a la comprensión de las mismas por las familias y alumnos. Sin duda, se trata de un sistema de evaluación más justo, ecuánime y capaz de recoger todos los datos y pormenores de nuestro trabajo educativo diario.