Destacar el curso de formación recibido en el centro para elaboración de UDI y tareas....Todos nos hemos formado , aprendido y compartido experiencias 

 

Dificultades en el uso de las Tics ,debido a problemas técnicos

 

Positivo el trabajo de los grupos interactivos ....Padres muy colaboradores y con una asistencia muy constante

 

Tertulias dialógicas desarrolladas con éxito

 

demasiado tiempo en rellenar y cumplimentar documentos

La lectura debe considerarse, a la hora de evaluarla, un bloque independiente ...Continua y presente .Rúbricas como hilo conductor desde primer ciclo hasta 4º de la ESO 

" La diferencia entre dos maestros/as  reside en su metodología y en su ideología".

Esta frase escuchada, hace tiemo,  a un profesor de Ciencias de La Educación se me quedó grabada; seguramente porque la suscribo plenamente.

Ahora , en nuestro Colegio, estamos inmerso en un proceso de cambio metodológico que no solo implica "modernización"  o "actualización"; queremos educar de otro modo, está claro ; pero, ¿ para "crear" el mismo tipo de alumnado?

En una época en que se desbanecen las titulaciones en pro de los saberes; en los que en muchos trabajos  no importan los títulos - ni te los piden- sino que tu "perfil" sea el que se requiere, ¿tenemos claro qué tipo de alumnado queremos? ¿ Hábiles? ¿ competentes? ¿ Capaces? Sí; pero en qué?

Ese "melón" tiene que abrise.

No hay cambio metodológico sin cambio ideológico y si el primero es complicado es segundo no lo es menos.

El balance general del curso 16-17 en cuanto al desarrollo de grupos interactivos con voluntariado y cooperativos, ha sido positivo; pués me ha permitido, en áreas como matemáticas (principalmente), sociales, naturales y organización del trabajo en general (presentación de los temas, vocabulario, actividades, resúmenes, mapas conceptuales...), reforzar los objetivos mínimos propuestos y aquellos conceptos con más dificultad. También nos han servido para el repaso, preparación de pruebas-control, y todas aquellas actividades de cualquier índole, que han requerido el trabajo en grupo (asambleas, lecturas comentadas, preparación de murales, exposiciones...).

Desde septiembre el equipo docente de secundaria, al igual que el de primaria e infantil, se pusieron manos a la obra para determinar el uso de la nueva herramienta de evalución "rúbricas". En secundaria se empezó determinando el número de rúbricas a utilizar por todos y las rúbricas específicas de lengua y matemáticas. El trabajo que más tiempo llevó fue determinar las categorías que debían llevar cada una de las rúbricas y el texto de cada uno de los niveles de logro. Luego se decidió el uso que todos los docentes iban a hacer de las rúbricas. Durante el año se ha ido viendo la dificultad de la implantación de la rúbrica (¿Cómo hacérsela cercana al alumnado? ¿En qué momentos pasarlas? ¿Qué instrumento utilizar para recoger la información?), y en las sesiones de equipos docentes se han ido aportando soluciones para avanzar. Una de las conclusiones a las que se ha llegado recientemente en este tercer trimestre es la necesidad de revisar las rúbricas y las categorías que aparecen en alguna de ellas de cara al año que viene.

A principios del tercer trimestre comencé poniendo en práctica una UDI en la asigntaura de economía, cuyo producto final ha sido la elaboración de un "trivial" de preguntas sobre los criterios de evaluación trabajados. Se estuvieron realizando difrentes actividades y ejercicios durante tres semanas y en la cuarta dedicamos un día a la elaboración de las preguntas y dos días para poner en práctica el trivial y demostrar lo aprendido. En una última sesión se realizó una prueba escrita individual donde los alumnos pudieron demostrar lo que habían retenido sin necesidad de estudiar de memoria. Todas las sesiones de la UDI se han llevado a cabo en una organización de aula en grupos heterogéneos, donde han realizado tanto actividades individuales como grupales. El resultado es muy satisfactorio tanto a nivel de resultados académicos como a nivel de clima de aula. Las dificuultades encontradas empiezan por el cálculo de sesiones establecidas que han sido más de las esperadas para la realización dela UDI completa. Estaba pensada para 3 semanas y fueron finalmente un poco más de 4 semanas.

Este trimestre hemos realizado una tarea relacionada con las montañas, se ha elaborado un libro con información relativa a las montañas. Hemos investigado, y recogido información. Cómo son las montañas, animales que viven en ella, plantas, como cuidar nuestro medio ambiente. Ha sido una tarea muy motivadora para el alumnado. Y poco a poco es más fácil programar de esta manera en nuestro ciclo.

Mi opinión, a la vista de los resultados obtenidos y de lo que se ve en clase:

• Trabajar en grupo es bueno para los alumnos. Aprenden determinadas cosas que no se dan en las materias como por ejemplo a relacionarse entre ellos, a argumentar, a llegar a acuerdos, etc.
• Es más fácil trabajar en grupos en determinadas materias.
• Basar todo en el trabajo en grupos es un error, todo no se puede ceñir al grupo. Con el trabajo individual también se aprenden muchas cosas.
• Los trabajos hechos de manera individual son mucho más rápidos. Este es el primer año de los diecinueve que llevo trabajando en el colegio en el que solo he visto diez temas de los dieciséis en los que se divide el temario del curso. Además hablando con el resto de compañeros hemos tenido casi todos el mismo problema, a todos nos van a faltar muchos temas por dar.
• Los alumnos que no trabajan de manera individual tampoco trabajan en grupo.
• Los alumnos justifican su mal comportamiento en el grupo en que no les dejan. Los alumnos ¿buenos¿ se ¿corrompen¿ con los no tan buenos. Las familias, en la mayoría de los casos, se creen lo que argumentan sus hijos y no parecen muy de acuerdo con este tipo de trabajo. De hecho, la mayoría de los alumnos que se van del colegio, se van a colegios o institutos donde no se trabaja en grupo como norma general.

De hecho ya he escuchado por parte de algunas familias la excusa de que sus niños no se comportan bien por culpa de los grupos o incluso expresan su deseo de cambiarse de centro.

 

Conclusión:

• Es necesario que los alumnos trabajen en grupo e individual.
• Sería necesario que los alumnos estén colocados en clase de forma ¿no grupal¿. Los alumnos se quejan de la postura para ver la pizarra o proyector. Se quejan del cuello además de que la disposición en grupo incentiva el despiste y la distracción. En el momento de trabajar en grupo se mueven y se agrupan.
• En algunas materias se puede trabajar en grupo todo el tiempo, en otras no.
• Los trabajos en grupo son parte de la evaluación pero no se debe descartar el control o examen. Para determinadas asignaturas el control evalúa de una vez numerosos criterios de evaluación que de no hacerlo con esta herramienta lleva mucho tiempo evaluar a todo el alumnado.
• La inclusión del trabajo en grupo en la clase debe de hacerse de forma paulatina puesto que en caso contrario genera disconformidad en las familias que son las que deciden donde se matriculan sus hijos.
• El trabajo en grupo no está implantado en institutos y solo es un 20%  de la nota de los alumnos es la universidad. Esto hace que los padres no ven la necesidad de basar todo el esfuerzo de sus hijos en dicho trabajo cuando luego ven que sus hijos al llegar al instituto deben estudiar. Los comentarios de los padres cuyos niños pasan al instituto son básicos para el buen nombre de un centro como el nuestro.

En el grupo de mí tutoría se ha implantado el trabajo por grupos. Para llegar a dicha implantación se han tenido que hacer diversas actividades puesto que los alumnos se negaban a trabajar de dicha forma.

Primero se realizaban trabajos en grupos en casi todas las asignaturas, pero los profesores notaban que los alumnos se negaban e incluso protestaban abiertamente dicho trabajo. Argumentaban que había alumnos en el grupo que no hacían nada y vivían de los demás o alumnos que no hacían nada y bajaban la nota del grupo, llevándose toda la carga del grupo los alumnos ¿más trabajadores¿. Muchos de estos alumnos ante la imposibilidad de negarse a trabajar  en grupo lo que hacían es hacer todo el trabajo ellos, provocando numerosos conflictos.

Una vez que esto fue notificado a la dirección, esta, llegó a la conclusión de que los alumnos no sabían trabajar en grupo y para solucionarlo se dedicó la primera hora de todos los días de un mes a realizar actividades para enseñarles a trabajar en grupo. Y se volvió a intentar trabajar en grupo. Primero se realizaron parejas o tríos para que aprendieran y posteriormente grupos de cuatro o cinco. El resultado fue que seguían igual. Algunos alumnos querían volver a parejas. No se notó por parte de la mayoría del profesorado del aula ninguna mejora. Hay que destacar que dos docentes si notaron mejoría. Yo, personalmente, lo que notaba es que los alumnos trabajaban en individual y en algunos casos lo comentaban con los compañeros para ayudarles o en otros casos para que se copiaran.

Otra vez se notificó a la dirección y esta estimó oportuno que un grupo de prácticas lo intentaran de nuevo.  Se volvieron a explicar las bases de los grupos, se volvieron a hacer los grupos y se volvieron a implantar. Ahora mismo estamos en la fase de ver si esta es acertada o no. Personalmente, como tutor del grupo ya he tenido que cambiar casi todos los grupos por muy descompensados y  por conflictos entre miembros. Los miembros de los grupos han decidido realizar tres islas a miembros de sus grupos por razones diversas.

Con las rúbricas se suben las notas, puesto que las notas se dividen en 4 apartados y solo uno es para el suspenso. Además se valoran aspectos tan básicos como: estar en clase, puntualidad, etc., que suman a la nota.

La rúbrica no es algo tan novedoso puesto que la mayoría de docentes ya evaluábamos muchos aspectos en cada nota además de notificar al alumnado los aciertos y los errores peo no le poníamos ese nombre. Todos poníamos notas de cuaderno, por ejemplo, y en esta incluíamos aspectos como la presentación, ortografía,  contenidos, etc., que eran evaluados por el profesor y se les notificaba los aciertos y errores.

Hemos cambiado las herramientas de evaluación y hemos adoptado la rúbrica.  En el comienzo del curso presente discutimos por parte del profesorado de secundaria las herramientas a utilizar, llegando a la conclusión de la necesidad de adaptarnos a la nueva normativa de evaluación. En esta necesidad adoptamos la rúbrica como uno de los métodos de evaluación y llegamos al acuerdo de la utilización de esta en todas las materias con ciertas adaptaciones.

Este año hemos comenzado a evaluar con un nuevo sistema de evaluación, las rúbricas. Hay que decir que ha resultado ser una tarea complicada porque requería primero diseñar las  rúbricas y ser consensuadas por todo el equipo docente; en segundo lugar, hacer entender a los alumnos/as en qué consistía este nuevo sistema de evaluación y que comprendieran que en las diferentes tareas había que evaluar numerosos aspectos.

 

Este curso`entro en infantil para apoyar a varios alumnos com problemas de lenguaje .Una de las actividades en la que he participado ha sido en el  producto final de la tarea de plantar y recolectar habas.Los alumnos ha trabajado en todo el proceso que culminó con una merienda en la clase.

Con el proyecto de cole verde a lo largo del curso escolar participé con el alumnado de tercero de primaria en el patio ,plantando distintas plantas aromáticas que posteriormente se colocaron en jardineras en las ventanas de la clase.

Como profesora de apoyo he podido constatar al entrar en las clases de primer y segundo ciclo la puesta en práctica de las Udis que las profesoras realizán y llevan a cabo en sus aulas.

Con é el alumnado adquiere nuevos conocimientos y los puede aplicar, crear situaciones y espacios reales de comunicación, se ve alentado a usar y mejorar sus producciones lingüísticas orales y escritas, pueden poner en interacción los conocimientos adquiridos y relacionarlos entre ellos. A esto se suma el trabajo colaborativo como principal herramienta didáctica y la aplicación de la auto y la coevaluación como instrumento de evaluación formativa. Todo esto está suponiendo un cambio oganizativo y metodológico en las aulas que favorece no sólo la inclusión, sino también una mejora del rendimiento del alumnado, más adaptado a las necesidades actuales.

Durante este mes hemos continuado con el curso de la formación en centros donde el profesor ponente ha estado revisando y ayudando a la elaboración de las Udis  de todo el profesorado del centro.

El trabajo por tareas favorece el desarrollo de diferentes competencias y la aplicación de contenidos propios de diferentes áreas de conocimiento. Es una metodología que favorece la inclusión de todo el alumnado tan necesaria en cualquier centro y más concretamente en el nuestro.

El hecho de que tenga que concluir con un producto pienso que resulta estimulador y que puede motivar más al alumnado.

Mi pequeña aportación al proyecto del "Cole verde" ha estado centrada en los espacios comunes, esos espacios que todos y todas usamos y por eso a veces olvidados.