En infantil, como en cualquier otra etapa educativa, la motricidad no se puede disociar del resto de dimensiones del ser humano. Como maestra ha sido un descubrimiento los "cuentos motores". Nos encontramos ante situaciones de aprendizaje que además de estimular la imaginación y creatividad del alumnado a través de los canales habituales suman el movimiento a la experiencia lúdica.
Que el alumnado exprese alegría, tristeza, que salte, corra, repte o baile o que imite a un animal son algunas de las manifestaciones de estas situaciones de aprendizaje.