Grupos de trabajo
A nivel vital, la Inteligencia Emocional puede resultar igual o más decisiva que el cociente intelectual. Existe clara evidencia que las personas emocionalmente desarrolladas, las que gobiernan adecuadamente sus sentimientos y, asimismo, saben interpretar y relacionarse efectivamente con los sentimientos de los demás, disfrutan de una situación ventajosa en todos los dominios vitales; por otra parte, los que no pueden controlar su vida emocional se debaten en constantes luchas internas que afectan a su capacidad de trabajo y les impide pensar con claridad..