Situación de partida

Nuestro centro escolar se encuentra inmerso en un contexto socioeconómico deprimido. Venimos observando que la convivencia del alumnado está resultando cada vez más conflictiva, tanto dentro del aula como en los recreos y cambios de clase. El entorno en el que vive nuestro alumnado está fuera de normas, de sentimientos de pertenencia a un grupo, de falta de autoridad justa y necesaria para conocer los propios límites, el respeto por el prójimo y la falta de empatía. De ahí que hemos reflexionado sobre la necesidad de elaborar un material que nos permita enfrentarnos a esta situación.

Parece que fuera imposible tener un recreo sin conflictos entre el alumnado por lo que nos parece necesario trabajar la gestión de emociones para conseguir una convivencia más armoniosa.

JUSTIFICACIÓN

Nos parece fundamental el tomar conciencia de la importancia que tiene en nuestra vida el conocimiento y la regulación de las propias emociones y las de los demás.  Queremos dar importancia a la educación emocional, porque desde la etapa infantil se deben construir las bases de la personalidad y el aprendizaje del manejo de nuestras emociones para afrontar la vida adulta.

Queremos crear un ambiente emocionalmente estable y positivo, en el que nuestro alumnado se sienta seguro, que sea capaz de sentir, comprender y controlar  sus estados de ánimo para crear unas relaciones constructivas con los otros. Y nos gustaría que tuviera repercusiones en toda la comunidad educativa.

En la memoria de autoevaluación aparece dentro del área de clima y convivencia un indicador de tendencia variable referente al alumnado de enseñanzas básicas reincidente en conductas contrarias y-o gravemente perjudiciales para la convivencia. Partimos de esta situación con la intención de mejorarla.

 

Objetivos

OBJETIVOS	INDICADORES DE LOGRO
1. Aprender a convivir a través de la comunicación y expresión, trabajo en equipo, resolución de conflictos y sentimiento de pertenencia a la comunidad educativa.	- Reducir significativamente las conductas conflictivas. - Realizar los trabajos planificados en equipo. - Utilizar de forma correcta el lenguaje oral.
2. Desarrollar un programa de intervención en el aula para trabajar habilidades de educación emocional.	- Plasmarlo en el Proyecto Educativo y Programaciones Didácticas para aplicarlo en el aula en el horario dedicado a la tutoría. - Elaborar estrategias de actuación y una tabla de registro de su aplicación.
3. Fomentar la participación del profesorado en la formación de técnicas para el desarrollo de la educación emocional.	- Conseguir un 80% de asistencia a reuniones de formación y grupales.

 

Repercusión en el aula

La educación emocional tiene como objetivo el desarrollo de competencias emocionales. Entendemos las competencias emocionales como el conjunto de conocimientos, capacidades, habilidades y actitudes necesarias para tomar conciencia, comprender, expresar y regular de forma apropiada las emociones. Dentro de las competencias emocionales están:

 

1. Conciencia emocional: reconocer las emociones propias y las de los demás. Comprender causas y consecuencias de las emociones, evaluar su intensidad, reconocer y utilizar un lenguaje emocional de forma adecuada y apropiada, tanto en comunicación verbal como no verbal.

2. La regulación emocional: dar una respuesta apropiada a las emociones que experimentamos en cada momento. La autorregulación emocional incluye la tolerancia a la frustración, el manejo de la ira y del miedo, la capacidad de retrasar gratificaciones, las habilidades de enfrentamiento en situaciones de riesgo.

3. La autonomía emocional: consistente en desarrollar la capacidad de no verse seriamente afectado por los estímulos del entorno. Esto requiere de una sana autoestima, autoconfianza, percepción de autoeficiencia, motivación y responsabilidad.

4. Las competencias sociales: facilitan las relaciones interpersonales y ayudan a crear un clima social favorecedor del trabajo y el bienestar.

5. Las competencias para la vida y el bienestar: contribuyen al bienestar personal y social.

 

El desarrollo de competencias emocionales requiere de una práctica continuada. Por esto, la educación emocional se inicia en los primeros momentos de la vida y debe estar presente a lo largo de todo el ciclo vital.

 

Es así como vemos la necesidad de trabajar aspectos relacionados con la inteligencia emocional y la competencia social, de manera que los alumnos y alumnas sean capaces de desarrollar habilidades sociales, de tomar decisiones en grupo y de resolver conflictos pacíficos.

 

La repercusión en el centro vendría determinada por la correcta ejecución del objetivo ¿Dar una respuesta apropiada a las emociones que experimentamos en cada momento, mediante la utilización de recursos destinados a ello¿.

 

Actuaciones

ACTUACIONES
OBJETIVOS	TEMPORI ZACIÓN	RESPON SABLES	ACTUACIÓN
1. Aprender a convivir a través de la comunicación y expresión, trabajo en equipo, resolución de conflictos y sentimiento de pertenencia a la comunidad educativa.	Primer trimestre	Todo el grupo de trabajo	- Búsqueda de bibliografía especializada sobre convivencia. - Búsqueda de bibliografía especializada sobre educación emocional. - Elaborar unas normas de convivencia para los recreos.
2. Desarrollar un programa de intervención en el aula para trabajar habilidades de educación emocional.	Segundo y tercer trimestres	Todo el grupo de trabajo	- Elaborar pautas de intervención para los problemas de convivencia que surjan. - Experimentar las técnicas de intervención seleccionadas. - Realización de actividades y materiales relacionados con la resolución de conflictos.
3. Fomentar la participación del profesorado en la formación de técnicas para el desarrollo de la educación emocional.	Tercer trimestre	Todo el grupo de trabajo	- Asistencia al curso del CEP. - Participación en la formación del grupo de trabajo. - Lecturas relacionadas.

 

Metodología:

Nuestra metodología  será activa, crítica y reflexiva, los ejes que inspiran una pedagogía basada en la experiencia, participación, observación, trabajo en equipo y el papel esencial de la reflexión.

 

Nos basaremos en los siguientes principios:

 

• Promover la interacción el el aula, como motor de aprendizaje que favorece la integración del alumnado, la solidaridad y la creación de hábitos de trabajo cooperativos, fomentando las habilidades y capacidades individuales e incentivando el desarrollo de l autonomía.

 

• Plantearemos actividades cooperativas en pequeño y gran grupo, elaborando materiales que nos lleven a la reflexión, el análisis y la investigación.

 

• Crearemos un clima en el centro que propicie las relaciones afectivas y favorezca la exposición libre y creativa.

 

Una metodología, en definitiva, que favorezca la expresión y el control de las emociones en el niño y en la niña, desde edades muy tempranas, con objeto de incrementar el desarrollo pleno de todas sus capacidades afectivas, sociales y cognitivas.

 

Por otro lado, el contenido de nuestras reuniones girará en torno a los siguientes temas:

 

• Conocimiento, profundización y valoración de diferentes recursos didácticos.

 

• Elaboración de materiales y criterios para elaborarlos.

 

• Reflexión sobre la práctica docente.

 

• Consecución y desarrollo de objetivos.

 

Estrategias e indicadores para la valoración del trabajo

Evaluaremos los siguientes aspectos:

 

• Evaluaremos tanto los indicadores de logro como las actuaciones que se vayan realizando, poniendo en común durante las reuniones las experiencias que vayamos teniendo al aplicar el programa.

 

• Nivel de uso por parte del alumnado de los conceptos relacionados con emociones.

 

• Comprobación a partir de los registros del desarrollo de autorregulación emocional en los alumnos, comparando sus formas de actuar antes y después de la aplicación del programa en situaciones similares.

 

• Descenso en el grado de afectación sufrido por los alumnos como consecuencia de las conductas de otros, como indicador de aumento de autoestima.

 

• El grado de satisfacción del alumnado, poniendo especial interés en lo que cuenten durante los debates acerca de cómo se sienten en función de las formas de resolver conflictos.

 

• Mejora de la convivencia en el centro, observando sobre todo el tiempo de recreo que es cuando se producen más conflictos.

 

• Evaluaremos el grado de implicación del resto del claustro y de las familias conforme avance la aplicación del programa.