Los resultados obtenidos hasta ahora en el desarrollo del curso están siendo positivos y prácticos tanto en el marco de actuación de nuestra labor en el aula como en las relaciones interpersonales entre los miembros de la comunidad educativa.
Las sesiones están llevándose a cabo de una forma muy dinámica, intensa en los temas que se abordan y muy participativa por parte de los asistentes. Existe un buen clima de trabajo, yo creo que base primordial cuando la formación se trata de educación emocional. La ponente ha conseguido ese ambiente distendido donde es más fácil que las actividades que se llevan a cabo sean más enriquecedoras.
En mi labor diaria como tutora de primero, me está resultando útil la actividad formativa sobre las emociones, sobre todo, para ayudar a mi alumnado en el reconocimiento y verbalización de sus emociones relacionadas con la vida diaria en el aula, para una vez reconocidas las puedan gestionar de la forma más adecuada posible.
Creo que, debido a la amplitud del tema e importancia de la educación emocional en nuestra labor docente, se debería seguir profundizando en esta temática.