Formación externa: Valoración de las ponencias Inteligencia Emocional y Comunicación y Prevención del Abandono. Su aplicación

Taller de inteligencia emocional de Alberto Ortega, Inteligencia Emocional y Comunicación:
El taller fue ¿enganchante¿ y ameno.
El ponente habló, por ejemplo, de la conveniencia de la neuroplasticidad para un mejor aprendizaje y que ésta se puede favorecer simplemente cambiando de sitio. Sabiendo esto, durante estos meses, tanto en los diálogos en clase, como para otros tipos de actividades, estoy haciendo que los alumnos cambien más a menudo de sitio que antes, ya no sólo por una mayor dinámica, sino por favorecer su neuroplasticidad.
La ponencia también me hizo más consciente de la repercusión de las emociones en el aprendizaje de los alumnos, tanto de las mías, como las de ellos mismos. Lo que hago ahora de manera más consciente y como propósito es: me relajo antes de entrar en el aula, entro sonriendo y dedico el primer minuto (o más) a estar delante de ellos diciendo lo que haremos ese día e intentando captar su mirada.

Ponencia de Carmen Soler, Prevención del Abandono:

Me ha resultado bastante útil (cosa que no me lo pareció en un primer momento, dado que las enseñanzas que ella imparte no son muy parecidas a las de EEOOII y el ¿trato entre algodones¿ me parece un tanto exagerado). Sin embargo, la ponencia me ha sido muy útil en dos aspectos donde la he aplicado:
Por un lado, el tomarme más en serio las bonificaciones (la ponente habló de un sistema de bonificaciones). En la EOI, cuando en las actividades complementarias y extraescolares hay alumnos que se implican mucho, por un lado, no es justo ni pertinente darles más nota, pero por otro, tampoco es justo que no se les agradezca y se les incentive de algún modo. Así, cuando hicimos en enero en primero de alemán la actividad complementaria Kaffee und Kuchen (merienda con repostería de los países de lengua alemana y visita de nativas alemana y austríaca), a todos los alumnos que habían realizado las tartas (realización que implica tiempo, dinero, dedicación, interés ¿ y además estaban muy ricas!), se les obsequió en la siguiente clase con un pequeño regalo.
Por otro lado, habló Carmen Soler de tener un trato más personalizado y cariñoso con los alumnos para evitar su abandono. Me animé a tener ese trato con una alumna de primero que se fue por unos meses a Bélgica por motivos laborales. Para que no abandone y pueda reengancharse a final de curso, me ofrecí a corregirle las redacciones que voy mandando a la clase y que ella debe enviarme. También le envié el link para el muro de Padlet de su clase y las soluciones escaneadas al libro de ejercicios. La respuesta de la alumna ha sido: ¿muchísimas gracias por tu atención, te lo agradezco de corazón, me motiva mucho a seguir aprendiendo el idioma¿