Cuando nos escontramos ya en la recta final de la priorización de contenidos, decir que he echado en falta más orientación explícita por parte de la formación, pues sólo hemos contado con un ejemplo ya realizado de otro centro. Durante este proceso, me ha parecido que la priorización que hemos aplicado tiene su fundamento en nuestro consenso como grupo, que no tiene por qué estar mal, pero se me antoja puramente subjetivo a lo que como equipo docente hemos decidido.
Yo creo que si cada centro hace esto en esta manera subjetiva según opiniones personales, no conseguiremos un consenso en materia educativa intercentros, puediendo resultar muy diversa la evaluación de alumnado de centros que pueden estar situados en el mismo barrio, o incluso en lugares muy alejados pero con características de alumnado muy similares.
Yo me pregunto si esto es lo que el sistema educativo está persiguiendo al no dar los contenidos ya priorizados en base a fundamentos de la pedagogía y la psicología infantil. En mi opinión, si realmente esto es lo que se persigue, los maestros de cada centro estamos generando, sin quererlo y sin que sea nuestra competencia ni nuestro deseo, diferencias entre el alumnado al depender de nuestra opinión personal qué criterios deben ser prioritarios, secundarios o de ampliación.