En los 14 años de docencia que llevo, nunca antes he vivido unas jornadas de reflexión tan intensas como las de este curso. Nos estamos involucrando todos/as en la renovación del Plan de Centro que, sin duda, nos ayudará en nuestra práctica como docentes. A veces oxidada (obsoleta) por el paso del tiempo.
Estas jornadas nos han permito profundizar muchísimo en el curriculum y obligado a llegar a entendimientos y a acuerdos con nuestros/as compañeros/as.
Este primer paso que hemos dado en cuanto a la distribución de los contenidos (en sus respectivos bloques) clasificándolos en prioritarios, secundarios o ampliación y su reparto en niveles; además de la estructuración de los criterios de evaluación relacionándolos con los bloques de contenidos; y, finalmente, la disposición de los indicadores por niveles, nos va a permitir no solo hacer unas programaciones de ciclo y aula más precisas, sino dar una mejor respuesta a la atenciaón a la diversidad, ya que vamos a tener los elementos necesarios para realizar las adaptacionoes curriculares no significativas, los PEANP y los PRANA de una manera clara y concisa.
En ciclo también vimos que este trabajo nos facilitará la selección de aquellos contenidos mínimos que debe adquirir al alumnado para promocionar de nivel y ciclo.