Lunes, día ajetreado, corro, vuelvo a casa, como, recojo, me vuelvo al cole,... comienza el curso de mindfulness, me entrego, me relajo , me dejo llevar...... ¡¡¡ Recibo ese masaje que tanto me aporta.... tranquidad!!! ¿Es posible que me sienta tan bien??? Me sigo dejando llevar....... visualizo la niña en la playa.... ahí estoy... en mi infancia.... en mi mundo, feliz y querida, protegida....
Me abruma las evocaciones y comentarios de los compañeros/as.... sobre todo la facilidad con la que nos hemos sincerado todos, ¡con las pocas sesiones que llevamos!....
Busco en mis pensamientos situaciones en mi vida, iguales a las que comentan mis compañeros/as,.... las identifico y las hago propias.
Me siento bien,.... escuchando y aportando en este grupo.
Me ha encantado terminar el lunes así,.... me vuelvo a casa, a mi rutina, pero tranquila, relajada, feliz, con ganas de poner en práctica mañana todo lo que he aprendido hoy.