Grado de consecución de los objetivos

La mayoría de objetivos propuestos han sido cumplidos de manera satisfactoria. No obstante, nos hemos encontrado con situaciones frustrantes que nos han impedido alcanzar varias de nuestras metas. Por una parte, la normativa en cuanto a derechos de autor es bastante opaca y controvertida; nuestro deseo de crear un repositorio digital se ha visto truncado por el peligro de cometer una ilegalidad a la hora de compartir de forma abierta y vía online todos nuestros fondos encontrados hasta el momento. Nuestras investigaciones se han visto frenadas ante la necesidad de asesoramiento legal que apoyase nuestra tarea y nos permitiese, de forma segura, poder crear esta plataforma digital sin el temor a incurrir en un delito o ser denunciados por los herederos de Ocón, a los cuales pertenecen sus derechos de autor. Por otra parte, el archivo Díaz Escobar, cuyos fondos en su momento pudimos comprobar que albergaban un suculento cúmulo de partituras de Ocón, está siendo catalogado por el propio archivo y aunque, poco a poco, será expuesto en el antiguo conservatorio María Cristina, no nos han permitido tener acceso a este material ni nos han dado una fecha exacta de cuándo será expuesto públicamente.

Nivel de interacción entre los participantes

La comunicación entre los integrantes de este grupo de trabajo ha sido crucial. La cantidad de archivos y fuentes cotejadas implicaba una diversificación en la asunción de las diferentes tareas, asumiendo cada integrante parcelas de investigación diferentes. El archivo Díaz Escobar, la sala María Cristina, la catedral de Málaga, los antiguos fondos de la Sociedad Filarmónica, y la propia biblioteca del actual conservatorio superior han sido los principales puntos de acción. Olga Domínguez visitó el archivo Díaz Escobar y la sala María Cristina, comprobando que parte del material encontrado en dicho archivo ya estaba siendo expuesto al público; por otra parte, María Teresa García Molero ha estado fotografiando un buen número de partituras procedentes de la Sociedad Filarmónica, Miguel Ángel Galeote, Laura Lara, Maribel Sanjuán y María Ruiz han asumido el cotejo y organización de la ingente cantidad de partituras que alberga el conservatorio superior de Málaga, en cuyos fondos aún hemos encontrado alguna pieza de Ocón. Por último, y no menos relevante, debemos citar la tarea de investigación realizada por Mª Jesús Viruel centrada en la puesta en marcha de un repositorio digital, cuya labor le ha puesto en contacto con numerosos documentos legales y normativa relacionada con los derechos de autor y otra serie de asuntos.

Grado de aplicación en su contexto educativo

Todo el material encontrado podrá formar parte de la base de datos en la que se reflejan los fondos conservados en la biblioteca del conservatorio superior. De hecho, algunas organizaciones musicales malagueñas ya han mostrado su interés por estrenar algunas de estas piezas. Y no descartamos que, en un futuro muy próximo, sean los primeros en dar vida a estas piezas que duermen esperando a ser oídas nuevamente; pues, desgraciadamente, el arte de la música necesita de un intermediario para poder llegar a los oídos del público.

 

Efectos producidos en el aula tras la transferencia de lo aprendido

Hemos comunicado a parte de nuestro alumnado los hallazgos realizados hasta el momento para que, de esta manera, sean conscientes del material tan relevante que nuestra biblioteca conserva. Creemos importante que conozcan la figura de Eduardo Ocón y que, dados los últimos hallazgos, su biografía y legado compositivo no han sido totalmente desvelados hasta ahora.

 

Productos, evidencias de aprendizaje que se han adquirido

El producto más destacado de todos estos meses de trabajo y, sin duda, fruto de horas de incesante búsqueda, son: 1) las fotografías realizadas del material descubierto hasta el momento, incluyendo varias letanías a dos voces, una letanía a tres voces, una salve a dos voces, una salve a tres voces, unas obras tituladas ¿Asumpta est¿ y ¿Luam pulchri sunt¿ y un credo. Además, en la catedral de Málaga se conserva un memorial de Eduardo Ocón de 1852 al que hemos tenido acceso y que, evidentemente, puede suponer una pieza más del puzzle con el que componer su definitiva biografía. En este documento, conservado en el legajo 616, dice literalmente:

Eduardo Ocón, seise que ha sido y actualmente ministro de coro: con el más profundo respeto a V. I. expone: que conviniéndole a sus intereses y a la subsistencia de su familia, retirarse de esta Sta. Iglesia para procurarse mayores ventajas para atender a tan sagrados objetos, conservando siempre un tierno agradecimiento hacia este Ilustrísimo Cabildo por los singulares favores que le ha dispensado desde su niñez, por lo tanto.

Suplica reverentemente se sirva admitirle la dimisión que hace de su actual destino y del encargo que se le confirió, del ciudado y dirección de los seises, deseando que S. I. ocupe en cosas de su superior agrado a el que queda rogango al Altísimo que sus vidas, por ¿?. Málaga, 17 de enero de 1854

 

Destacar aspectos que hayan resultado interesantes

En nuestra tarea hemos considerado de sumo interés el hecho de que sigan apareciendo piezas de este compositor en diferentes archivos de la provincia. La última monografía dedicada a Eduardo Ocón fue publicada por Gonzalo Martín Tenllado en los años 90; sin duda, los nuevos hallazgos suponen un nuevo impulso que nos ayudarán a recomponer la biografía y corpus compositivo de Ocón.

 

Destacar aspectos susceptibles de mejora

Por una parte, nos gustaría resaltar la impotencia que ha supuesto para nosotros la falta de asesoramiento legal, pues en una tarea como la creación de un repositorio digital hay que andarse con pies de plomo. Una opción para años próximos sería recurrir a la asesoría jurídica de la Degación de Educación de Málaga, donde podrán darnos toda la información que, desgraciadamente, este año no hemos podido alcanzar debido a nuestra falta de conocimientos legales.