Con este cuento se intenta romper con los estereotipos sociales a través de un niño al que le gustaba el color rosa y realizar todo tipo de juegos.
Se ha narrado el cuento y se ha visionado en la pizarra digital, con un posterior debate en al asamblea en la que los niños/as han definido sus gusto y hemos resaltado que no hay juegos que sean para niños y otros para niñas, sino que todos los juegos son para todos/as, al igual que los colores.
Se ha ampliado el rincón de los disfraces con capas y faldas de diferentes colores para ser usados por todos los niños y niñas.