Según lo que hemos investigado estos días la mejor forma de empezar a trabajar el ABN en nuestras clases de Infantil es introduciendo los cuantificadores.
Los cuantificadores son palabras que aluden a la cantidad de elementos de un conjunto, sin expresar números concretos . Su significado real dependen del contexto en el que se aplique y del conjunto al que se refieran.
En Infantil empezaremos a trabajar los cuantificadores más usados en la vida cotidiana (pocos, muchos, todos, casi todos, nada) y las expresiones de relación y comparación de cantidades (más que, menos que, igual que). El método ABN nos recomienda siempre hacerlo de manera contextualizada y manipulativa.
El aula de Infantil es un escenario ideal, lleno de oportunidades constantes en la jornada para trabajar los cuantificadores, haciendo que los niños se paren a analizar la realidad usando estos términos y animándolos a hacerlos (podemos usar expresiones , y hacer que ellos las usen, como por ejemplo "muchos niños en la fila", "pocos juguetes en la caja", "todos los libros están en la estantería"...)
Además de un constante uso cotidiano, el método ABN propone una serie de actividades tipo para trabajar los cuantificadores en clase. Estas actividades son ideales para desarrollarlas en la típica asamblea con la que comienza nuestra jornada. Son las siguientes:
1.- Diferenciar conjuntos donde haya muchos elementos de conjuntos donde haya pocos elementos.
2.- Indicar en qué plato o recipiente hay más elementos.Indicar en qué recipiente hay menos elementos. El ejercicio se irá complicando haciendo que la diferencia sea cada vez menos evidente.
3. -Quitar todos los elementos que hay en un recipiente
4.- Sobre dos recipientes con el mismo número de elementos, hacer que uno tenga más que otro. Después hacer que uno tenga menos que el otro.
5.- Tomando como referencia un modelo o recipiente con un número determinado de elementos, crear dos nuevos conjuntos: uno con más elementos que el modelo de referencia y otro con menos elementos que el modelo de referencia.
Para llevar a cabo estos juegos deben utilizarse objetos significativos y atractivos para el niño, pero también deben tener un tamaño justo para que formen facilmente un conjunto y se manipulen cómodamente. Pueden ser muñecos pequeños, coches pequeños, lápices, palillos de polo, botones grandes,...
Se recomienda empezar estos ejercicios ya en el nivel de tres años, una vez superado el periodo de adaptación. Hemos comprobado que finales de octubre es una buena fecha para comenzar. Los ejercicios se repetirán tres veces por semana durante todo el primer trimestre.
En el nivel de 4 también pueden hacerse una vez por semaba a modo de recordatorio. Se hará igualmente en el nivel de 5 años pero con una complejidad mayor (diferencias en los conjuntos menos evidentes ycombinación de órdenes y consignas).