En el aula de compensatoria se está aplicando esta nueva perspectiva de resolución de problemas con algunos alumnos/as debido a las características del alumnado que acude a la misma. Desde la perspectiva tradicional uno de los mayores problemas con los que me encuentro con el alumnado es la comprensión del problema debido a los extensos obstáculos que pueden aparecer. Como puede ser, el nivel de comprensión lectora, los conocimientos previos o las estrategias de resolución de problemas. Desde este nuevo enfoque, aunque el cambio está siendo algo costoso porque no están acostumbrados, la motivación del alumno hacia este tipo de problemas está siendo muy gratificante, evolucionando poco a poco en el razonamiento lógico matemático. Esta forma de trabajar los problemas me está pareciendo muy beneficiosa y motivadora para el alumnado por lo que se seguirá trabajando a lo largo del curso.

Con este proyecto se desea conseguir un método para la resolución de problemas matemáticos y que el alumnado se sienta cómodo realizando estas actividades, así como que realice un aprendizaje significativo y útil para su vida diaria. Se ha considerado necesario un cambio en la forma de resolver los problemas.
Para ello hemos tenido que
-Conocer e investigar otro método en la resolución de problemas matemáticos.
-Analizar los aspectos metodológicos más significativos que hacíamos y a partir de ahora, más creatividad y razonamiento en la mente de los niños.
-Proponer un nuevo método de resolución de problemas.
-Resolver situaciones problemáticas a partir de otras nuevas propuestas
La misión del docente, según el libro de Fernández Bravo, consiste en
Enseñar desde el cerebro que aprende, no desde el cerebro que enseña. Sólo cuándo un problema matemático se convierte en un reto para los alumnos, es cuando ellos ansían resolverlo; mientras que no lo sea, no hay estímulo alguno. Ayuda a entender cómo enseñar a los alumnos la forma de enfrentarse al problema, a verlo desde una perspectiva más científica y desde la curiosidad. Hay que hacer atractivo el conocimiento, pero para el que aprende, no para el que enseña, y eso quiere decir despertarles las ganas de querer hacer.

Pero, el exceso de temas a tratar en el aula limita, muchas veces, la reflexión y la comprensión de los conceptos más básicos entre el alumnado. Señalo que el "principal inconveniente" para el desarrollo de este sistema son los currículos "demasiado amplios", que impiden a alumnos y maestros detenerse en comprender los temas , abordarlos con más profundidad y con actividades que enganchen a los alumnos.
No obstante seguiremos trabajando con la metodología que nos han enseñado con este proyecto, ¡claro está! Lo ideal, sería comenzar en los primeros cursos de Primaria para que este avance pueda apreciarse .Si bien considero que, en este año escolar, aún "es pronto" para afirmar que con este nuevo planteamiento ha mejorado el rendimiento de mis alumnos, pues ha pasado poco tiempo desde que empecé a aplicarlo.
También destaco la confianza en el proyecto, pues entiendo que si hay algún cambio, es para mejorar . Por el momento, percibo en los niños de mi clase un mayor interés, incluso entre los que presentan más dificultades. El alumno que podía odiar las Matemáticas, ahora puede llegar a entenderlas mejor y le gustan.

Ha sido una experiencia bastante práctica en su desarrollo que ha hecho que el alumnado de forma espontánea aplique los cálculos realizados en otras salidas programadas durante los trimestres.
El alumnado ha dado importancia al cálculo estimativo como vía comparativa ante la elección de lo más adecuado en la práctica diaria.

El cambio hacia una nueva metodología en la resolución de problemas está resultando muy interesante y motivador para el alumnado porque es algo nuevo para ellos y es necesario una participación activa de todos para la resolución de los mismos. En los primeros problemas planteados presentaron más dificultad porque no están acostumbrados a este nuevo planteamiento en el que pueden faltar algunos datos pero a medida que lo vamos trabajando les está gustando más y están más motivados avanzando en el razonamiento lógico matemático, por lo que se seguirá trabajando a lo largo del curso.

Trabajar la resolución de problemas en mi aula, dentro de la perspectiva que propone Fernandez-Bravo ha supuesto un avance significativo a nivel de competencia matemática en mis alumnos/as de cinco años, sobre todo a nivel de lógica. Suelo trabajarlo en el momento de la asamblea, todos reunidos. Comenzamos resolviendo problemas de Quinzet y a continuación les propongo la situación problemática correspondiente. Al principio no captaban la idea, pero conforme los hemos ido introduciendo y avanzando en complejidad, han llegado a dar distintas soluciones, aportando cada uno/a la suya propia y dejando a la tutora asombrada por el avance.

Aunque al principio este tipo de problemas matemáticos a los alumnos les parecía extraño, poco a poco han ido entendiendo que solucionar un problema matemático no es solamente hacer unas operaciones y ya está. Sino, que a veces podemos encontrarnos con problemas en los que tenemos las operaciones hechas con su la solución y nos falta el enunciado del problema, el cual tenemos que inventarlo nosotros. Este tipo de actividad permite al alumnado moverse en varios sentidos para alcanzar la resolución del problema y no solamente en uno (desde el enunciado a la solución). Esta actividad ha despertado un gran interés en el grupo, exigiéndome que cada día les presente un tipo de problema diferente. Hay varios alumnos que me dicen que esta forma de solucionar problemas parecen juegos. Y si jugar es lo que más le gusta a un niño, creo que vamos por un buen camino.

La actividad ha sido muy motivante para los chicos, sobre todo cuando el énfasis estaba en cualquier cosa menos en llegar a un cálculo tradicional.
La mayoría se han desarrollado de manera escrita, con el fin de que sirvan en nuestros materiales de ejemplos para continuar trabajando.
Algunos eran difícil de resolver, otros con pautas y ayuda menos, pero todos han tenido un mismo desenlace, la motivación y la ilusión del grupo.
Por petición del grupo aula y por lo bien que resultaron, seguiremos en ello.

Este método muestra a los alumnos que los problemas son algo real, cercano a situaciones de su día a día, y no son una serie de datos sacados de un libro. En un principio, ellos no se veían capaces de encontrar solución a este tipo de problemas, pero hemos conseguido que, al final, se den cuenta de que incluso en algunos casos es algo fácil.
Además con esta forma de trabajar conseguimos abrir sus mentes, se trabaja la creatividad y la imaginación, Ha ayudado mucho el trabajo en parejas y equipos.

Han acabado disfrutando al ver que son capaces de realizar estos logros.