Situación de partida

Es sorprendente ver cómo los adultos pueden pasarlo tan mal a la hora de enfrentarse a la situación de hablar en público. Gran parte de nuestro alumnado sufre de "estrés" a la hora de expresarse en público en la lengua extranjera; durante las horas de clase, pero, sobre todo, a la hora de examinarse. Queremos disminuir ese grado de incomodidad y que afronten ese reto desde otra perspectiva. Hay casos, incluso, en los que el alumnado abandona la enseñanza no por la dificultad de la materia, sino porque no se sienten capaces de enfrentarse a ese reto.

Pensamos que para que el alumnado tenga éxito en su proceso de aprendizaje, se le debe hacer protagonista de éste, pero al mismo tiempo le acompañaremos para que pueda elegir su propio camino, ayudándole a reconocer sus puntos fuertes y a cómo afrontar las limitaciones auto-impuestas por sus creencias ("no soy capaz", "no se me da bien"...) Tenemos que cuidar al alumnado, no solamente para que aprenda conceptos sino también para propiciar un mayor auto-conocimiento, aceptación y una mayor seguridad en sí mismos. En definitiva, no solamente abarcar el aprendizaje en el ámbito intelectual, sino dar protagonismo también a los factores emocionales.

El coaching mejora el autoconocimiento y la comunicación dentro de las aulas. Optimiza la actividad personal y de equipos. Para el alumnado es una verdadera preparación para la toma de decisiones. Está indicado para lograr el éxito en materias escolares y también para realizar un cambio de motivación global que mejore la actitud ante el estudio y el aprendizaje. De ahí que lo hayamos escogido como nuestra herramienta ¿aliada¿.

 

Objetivos

Disminuir el estrés y el miedo que muestra el alumnado a la hora de expresarse en la lengua extranjera. Lo que buscamos es ver aquellos aspectos mentales que hacen que las personas no obtengan los resultados que están buscando. Entonces, a través del coaching lo que se puede descubrir es una serie de herramientas que pueden facilitar la mejora del alumnado de manera que consigan los objetivos y las metas que está persiguiendo. Gracias al coaching, el profesorado tendrá la oportunidad de hablar más con el alumnado, pero también hará que éste reflexione sobre sus comportamientos, sus  actitudes y también en la resolución de conflictos. En este sentido, el profesorado en lugar de mediar, les hará reflexionar sobre la situación en cuestión (falta de motivación, miedo, gestión del ridículo¿) para poder buscar un camino que lleve a su resolución, motivándolos a crecer como alumnado y como personas. Gracias al coaching se podrá obtener más del alumnado, aparte de hacer del aprendizaje un proceso más placentero.

 

No solamente obtendremos un mejor ambiente en la clase donde reine la armonía de todos los elementos, sino que despertaremos curiosidades, dejaremos miedos atrás, aprenderemos a aceptar "fracasos" y a no verlos como tal sino como retos, como un juego en el que se vuelve a participar una y otra vez. La motivación será nuestra cómplice en la mejora de resultados, en el bienestar de nuestro alumnado y en el descenso de abandono en nuestras enseñanzas. El grupo de trabajo va a investigar sobre maneras de hacer que el alumnado gane confianza en sí mismo y pierda el miedo a la hora de expresarse en público en una lengua extranjera.

 

Repercusión en el aula

El alumnado se sentirá más cómodo y más capaz, lo que hará que baje la tasa de abandono y aumente la tasa de éxito. Y esto se conseguirá gracias a los siguientes puntos:

 

Incrementar la conciencia del docente y del alumnado. Esto implica en el docente saber  observar, interpretar y analizar correctamente el entorno de aprendizaje de su alumnado. Pero no sólo debemos desarrollar esta conciencia en nosotros como docentes, sino también en el alumnado. De esta manera podrá comprobarse que elevar la conciencia de los estudiantes va a ayudarles a conocerse a sí mismos y a su entorno, lo que les dotará de mayor confianza a la hora de realizar cualquier tarea.

 

Mejorar la auto-creencia / auto-confianza. La capacidad que la persona tenga para entender que puede conseguir lo que se proponga, es decir, creer en sí misma y confiar en que puede conseguir sus metas. La auto-creencia es una capacidad esencial en el sentido ya que sitúa al alumnado en un estado positivo, de confianza y creencia en el cambio, que lo dirige hacia el desarrollo académico y  personal.

 

Desarrollar la responsabilidad. Desarrollar la responsabilidad en el alumnado requiere generar un compromiso por sus actos, es decir, requiere que se responsabilicen de sus acciones, pero también que aprendan a responder ante las tareas que nosotros como docentes le pidamos. Si desarrollamos en el alumnado un sentido de responsabilidad y compromiso con ellos mismos y con sus vidas, mejorarán en su desempeño y esto reflejará un mayor desarrollo académico y personal. Cuando asuman su responsabilidad, avanzarán hacia el cambio y sabrán reformular positivamente lo negativo, convirtiendo los fracasos en oportunidades y en posibilidades, llevando a la acción lo que se propongan y mejorando sus resultados.

A medida que las personas integrantes del grupo vayan aprendiendo técnicas y dinámicas, se irán compartiendo con el resto del claustro ¿a través de una carpeta de Google drive y en breves reuniones- para que el fruto de nuestro grupo de trabajo llegue a todo el alumnado posible.

 

Actuaciones

Para que nos formen en diferentes técnicas de coaching y poder aplicarlas en clase.  Tenemos en mente solicitar la formación por parte de Jesús David López Aranda.  En su taller práctico de formación pedagógica nos ofrecerá nuevas herramientas extraídas del teatro para innovar en la metodología del profesorado de cualquier materia; para un aprendizaje más estimulante y que logre la implicación del alumnado. En conclusión, enseñar a aprender, aprender a improvisar, improvisar para aprender, aprender improvisando.

 

El objetivo final de este taller es que los docentes puedan dotar alumnado de las herramientas y destrezas necesarias para mejorar sus resultados en el aprendizaje de un nuevo idioma, mejorar sus competencias y habilidades personales, útiles a su vez, en el mundo laboral. En resumen, mejorar la autoestima, la concentración y el aprendizaje.

 

El alumnado será guiado mediante un asesoramiento personalizado  ¿socrático¿, introspectivo y de descubrimiento durante el desarrollo de las acciones formativas, fomentando su responsabilidad sobre su aprendizaje, su sentido crítico y su capacidad de análisis, asegurando así su motivación para favorecer la modificación de actitudes, la mejora y desarrollo de las conductas deseadas. Recibirán un entrenamiento actoral que favorecerá su actitud creativa y el trabajo en grupo, mejorando sus competencias para la consecución de sus objetivos futuros. Las sesiones serán guiadas a través del coaching y el feedback, recibiendo un asesoramiento constante y continuo que permite desarrollar la autoestima y romper sus creencias limitantes iniciales para fidelizarlas con la realidad reflejo de sus comportamientos. La sinergia que se genera fortalecerá la ayuda mutua que, a su vez, optimiza el buen desarrollo de las habilidades y la improvisación.

 

Se dispondrá de una atención personalizada, así como global dentro del aula para fomentar aún más, el pensamiento reflexivo, el autoaprendizaje y favorecer su búsqueda, desarrollo y motivación de la mejora continua de sus habilidades, aptitudes y actitudes hacia sus competencias y habilidades sociales, formalizando una relación con el alumnado para guiarlo en el aprendizaje y utilidad del idioma.

Además, si encontráramos algún manual que nos pareciera útil para nuestro proyecto, lo solicitaríamos al CEP.

Actuación	Temporalización	Responsable
Contexto. En esta primera fase propiciamos un clima de confianza en el aula. Con ello pretendemos generar en el alumnado la complicidad y el compromiso necesarios para que el proceso fluya por el camino idóneo. Al ser una fase inicial, es recomendable que se realice a los inicios de curso con actividades de juegos y dinámicas de cohesión, pero que también se busque tiempo para incluirlo en la rutina del aula, así tendría un mayor impacto. Los recursos didácticos a utilizar serían la escucha activa y la escucha empática. Resulta fundamental ponernos en el lugar del alumnado.	Hasta diciembre	Todas las integrantes del grupo
Situación actual. En esta fase perseguimos conocer al grupo en general y al alumnado de manera particular. Analizaremos aspectos cualitativos tales como necesidades, expectativas, valores y cohesión de grupo, entre otros. Existen varias formas de realizar este conocimiento; la indagación y la autoevaluación serían dos de ellas. Los recursos didácticos a utilizar pasarían por preguntas abiertas e inteligentes, para dejar expresarse al alumnado y la observación, tanto de la conducta verbal como de la no verbal. Iremos teniendo en cuenta qué actividades funcionan para elaborar informes con estas buenas prácticas.	Hasta diciembre	Todas las integrantes del grupo
Situación deseada. En esta fase es donde se establecen las normas de clase, así como los contenidos, evaluaciones y demás objetivos. Perseguimos hacer reflexionar al alumnado sobre la importancia de su esfuerzo, compromiso y actitudes necesarias para conseguir las metas que se propongan. El resultado de esta fase debe ser una descripción detallada a nivel grupal o individual del resultado esperado (a final de curso, trimestre, semana¿ según el plazo al que se plantee el proceso: corto, medio o largo plazo).	Enero	Todas las integrantes del grupo
Aprendizaje. Esta fase es de vital importancia ya que es donde se produce el aprendizaje en su mayor estado. En ella nos vamos a basar en la siguiente metodología: aprender a aprender; motivación; feedback o retroalimentación. Para realizar tan dificultosa tarea deberemos promover la escucha activa entre todas las partes, transmitir motivación y pasión en el logro, fomentar la confianza y la seguridad en sí mismos, así como saber comunicar al alumnado de manera asertiva cómo está siendo el proceso de aprendizaje y sus implicaciones. Para desarrollar esta metodología es fundamental utilizar un tipo de aprendizaje colaborativo, donde fomentemos el trabajo en equipo y la interacción entre todos los participantes. Con esta fase pretendemos preparar al alumnado para la acción, hacerles conscientes de la necesidad de cambio y de su responsabilidad en el mismo. Celebrar pequeños logros y promover su autonomía y actitud positiva al enfrentarse a retos, desde el día a día en el aula hasta la situación de examen.	Durante todo el curso	Todas las integrantes del grupo
Plan de acción. Consiste en analizar todas las acciones necesarias para llevar a cabo el programa y el tiempo de realización. Aquí vamos a establecer los objetivos a perseguir, vamos a desarrollar el procedimiento y su evaluación, así como pensar en los obstáculos que podamos encontrarnos. Para ello, deberemos incitar al alumnado y llevarlo a la acción, haciéndolo pasar de su zona de confort hacia una zona de aprendizaje y desafiando sus destrezas y habilidades. Podrán utilizarse herramientas como ejercicios de toma de decisiones e improvisación para trabajar los filtros afectivos.	Enero-febrero	Todas las integrantes del grupo
Seguimiento. Se refiere al momento de  evaluar la eficacia del plan de acción y, por otro lado, replantear nuevos objetivos. Para ello deberemos revisar los compromisos y evaluar los resultados, tanto a corto como a largo plazo.	Durante todo el curso.	Todas las integrantes del grupo

 

Recursos y apoyos

Para que nos formen en diferentes técnicas de coaching y poder aplicarlas en clase.  Tenemos en mente solicitar la formación por parte de Jesús David López Aranda.  En su taller práctico de formación pedagógica nos ofrecerá nuevas herramientas extraídas del teatro para innovar en la metodología del profesorado de cualquier materia; para un aprendizaje más estimulante y que logre la implicación del alumnado. En conclusión, enseñar a aprender, aprender a improvisar, improvisar para aprender, aprender improvisando.

Tipo de Recurso

Descripción del recurso

Ponente

El objetivo final de este taller es que los docentes puedan dotar alumnado de las herramientas y destrezas necesarias para mejorar sus resultados en el aprendizaje de un nuevo idioma, mejorar sus competencias y habilidades personales, útiles a su vez, en el mundo laboral. En resumen, mejorar la autoestima, la concentración y el aprendizaje.   El alumnado será guiado mediante un asesoramiento personalizado  ¿socrático¿, introspectivo y de descubrimiento durante el desarrollo de las acciones formativas, fomentando su responsabilidad sobre su aprendizaje, su sentido crítico y su capacidad de análisis, asegurando así su motivación para favorecer la modificación de actitudes, la mejora y desarrollo de las conductas deseadas. Recibirán un entrenamiento actoral que favorecerá su actitud creativa y el trabajo en grupo, mejorando sus competencias para la consecución de sus objetivos futuros. Las sesiones serán guiadas a través del coaching y el feedback, recibiendo un asesoramiento constante y continuo que permite desarrollar la autoestima y romper sus creencias limitantes iniciales para fidelizarlas con la realidad reflejo de sus comportamientos. La sinergia que se genera fortalecerá la ayuda mutua que, a su vez, optimiza el buen desarrollo de las habilidades y la improvisación.   Se dispondrá de una atención personalizada, así como global dentro del aula para fomentar aún más, el pensamiento reflexivo, el autoaprendizaje y favorecer su búsqueda, desarrollo y motivación de la mejora continua de sus habilidades, aptitudes y actitudes hacia sus competencias y habilidades sociales, formalizando una relación con el alumnado para guiarlo en el aprendizaje y utilidad del idioma. Además, si encontráramos algún manual que nos pareciera útil para nuestro proyecto, lo solicitaríamos al CEP.

 

Estrategias e indicadores para la valoración del trabajo

Por cada una de las fechas elegidas en el proyecto las personas que forman parte del grupo de trabajo se reunirán o se pondrán en contacto a través del foro de Colabora, por correo electrónico o por Pasen antes y después para poder realizar una reflexión y análisis de las actividades. Para la valoración se establecerán los siguientes indicadores:

1.       Grado de implicación y compromiso. Donde se tendrá en cuenta la asistencia a las reuniones, reparto de responsabilidades (cada persona se hará cargo del idioma que enseña), así como la participación en la plataforma.

2.       Más adelante se hará un comentario en el que se valorará el desarrollo del trabajo realizado.

3.       Creación de un clima de colaboración efectivo. Se hará un recuento de las aportaciones al grupo de trabajo. Se hará una autoevaluación, además, a través de la autoevaluación del grupo. Esto se realizará a través de formularios de Google.

4.      Periódicamente se realizará un seguimiento de la satisfacción del trabajo realizado por el grupo. Se realizará un debate en las reuniones posteriores a las actividades propuestas.

5.      Indicadores de tipo cuantitativo de materiales elaborados, número de reuniones. Esto se valorará teniendo en cuenta las actas de reunión.

Para permitir valorar el nivel de logro alcanzado se tendrá en cuenta el número de actividades propuestas por cada persona integrante del grupo. El número mínimo será de dos por persona.

 

A través de los formularios de Google se realizarán encuestas anónimas al alumnado en el que se pedirá un feedback de las actividades realizadas y ver cuáles han gustado más y por qué y cuáles no y ver por qué. De ahí podremos sacar cuáles podrían repetirse durante otros cursos escolares o estudiar posibles modificaciones.

 

El instrumento de evaluación de las actividades realizadas se hará de forma numérica, haciendo un listado de cada persona y sus actividades. El mínimo será de dos por integrante. Además, también se hará un recuento de reuniones a las que las personas integrantes asistan. El mínimo será de una por trimestre.

Para que nos formen en diferentes técnicas de coaching y poder aplicarlas en clase.  Tenemos en mente solicitar la formación por parte de Jesús David López Aranda.  En su taller práctico de formación pedagógica nos ofrecerá nuevas herramientas extraídas del teatro para innovar en la metodología del profesorado de cualquier materia; para un aprendizaje más estimulante y que logre la implicación del alumnado. En conclusión, enseñar a aprender, aprender a improvisar, improvisar para aprender, aprender improvisando.