Grado de consecución de los objetivos

En la recta final del curso, hacemos valoración de este grupo de trabajo, planteándonos en primer lugar el grado de consecución de los objetivos que nos marcamos al principio de curso:
Los objetivos que nos planteamos para la formación del profesorado han sido desarrollados y alcanzados con éxito, todos los profesores participantes tenemos claro cómo definir el trabajo colaborativo y cooperativo, lo hemos implementado en nuestras aulas, con nuestros alumnos, nos ha supuesto dedicación, trabajo e innovación en nuestra metodología, a la hora de plantear el trabajo en la clase. La acogida por parte de nuestro alumnado ha sido de lo más diversa. Este era uno de nuestros  objetivos: Implementar la metodología de aprendizaje cooperativo-colaborativo en el aula, como medida de atención a la diversidad, centrado en los grupos del primer ciclo de la ESO en el IES. Además de establecer unas pautas, rúbricas e instrumentos para evaluar la actividad académica de los alumnos mediante esta metodología y elaborar, del mismo modo, material que nos permita evaluar también la puesta en práctica de esta metodología en el aula, tanto por parte del profesorado como de los alumnos.

Nivel de interacción entre los participantes

Los profesores participantes en este grupo de trabajo, hemos desarrollado nuestra labor en, prácticamente, los mismos grupos, con los mismos alumnos. El intercambio de impresiones, cuestiones referentes a la distribución, desarrollo diario... están a la orden del día.

Es evidente, que el estado excepcional en el que nos encontramos ha marcado bastante nuestras interacciones, las de los alumnos, y todas las que se pudieran producir entre docentes y estudiantes.

Grado de aplicación en su contexto educativo

El trabajo cooperativo se ha aplicado en el primer ciclo de la ESO, y también en algunos grupos del segundo ciclo.

La acogida por parte del alumnado ha sido muy buena, algo que siempre te invita a seguir trabajando en esa línea que también han acogido. La asignación de roles y distintas responsabilidades en el aula, en los grupos, ha hecho que los alumnos hayan interiorizado este método de trabajo de forma rápida y eficaz.

Efectos producidos en el aula tras la transferencia de lo aprendido

La distribución del aula cuando trabajamos en grupos es distinta a la distribución que nos encontramos cuando no lo hacemos. 

Los alumnos han aprendido a organizarse, ayudarse y cooperar para, en el menor tiempo posible, distribuir el aula y su mobiliario de la forma adecuada para el trabajo que se iba a realizar, cooperativo, grupal, en parejas....

Productos, evidencias de aprendizaje que se han adquirido

Los alumnos que han trabajado en grupos, con roles asignados, han tenido que valorar el trabajo que han realizado tanto ellos como sus compañeros, han valorado el desempeño de los distintos roles por parte de sus compañeros, han rotado a la hora de trabjar los distintos roles asignados, de manera que han sabido cuáles eran las funciones y dificultades que cada uno de sus compañeros ha encontrado a la hora de realizar su labor.

Todo esto los ha hecho ganar empatía, no sólo con respecto a los compañeros, sino también con el profesor, saben lo que es pedir respeto, silencio, orden, ambiente de trabajo...

Destacar aspectos que hayan resultado interesantes

La asignación de roles y distintas responsabilidades en el aula, en los grupos, ha hecho que los alumnos hayan interiorizado este método de trabajo de forma rápida y eficaz.

Destacar aspectos susceptibles de mejora

La coordinación entre distitnas materias para establecer estos agrupamiento. Es algo bastante enredoso puesto que son muchas las materias con desdobles de alumnos, lo que supone que no cuenten con el total del grupo. Su aplicación sería bastante ventajosa para el funcionamiento del grupo.