Si estás en un momento de no saber por dónde tirar, ningún proyecto te convence, nada de lo que piensas o imaginas lo puedes considerar como "novedoso" u "original", entonces, quizás sea el momento de parar y de observar el mundo a tu alrededor.

 

Cómo hacerlo

En primer lugar:

1. Busca el momento para socializar con otr@s compañer@s (recreos, desayuno, comida de trabajo).
2. Conoce la localidad o el barrio a través, por ejemplo, de algún bar y observa cómo hablan, de qué tratan las conversaciones de la gente, qué te transmite lo que ves.
3. Habla con alguien ajeno al claustro, pero que conozca el funcionamiento del mismo: un vendedor, el cartero, personal de limpieza, etc.
4. Recopila información sobre el entorno: comercios, actividades económicas, ofertas culturales, talleres, etc.
5. Lo anterior lo puedes hacer consultando prensa local, visitando el ayuntamiento, asociaciones, etc. o buscando información por Internet.

 

Después, investiga sobre las opciones consideradas:

1. Sintetiza y ordena la información.
2. Contrasta esta información con otras personas: alumnado, compañer@s, etc.

 

De todas formas, para estados transitorios de confusión:

En ocasiones, antes de comenzar a plantearte tu reto, es bastante común sentirse así, lo que te impide tomar la decisión más acertada para plantearlo.

Para momentos así, en los que cuesta tomar una decisión, quizás te venga bien usar la técnica del 10-10-10. El siguiente artículo lo explica muy bien: El secreto de tomar buenas decisiones.

Cuando te sientas inspirado, puedes pasar a la siguiente fase.