Grado de consecución de los objetivos

Todos los objetivos de este grupo de trabajo se han cumplido. En cada una de las reuniones se ha abordado al menos uno de los objetivos o subojetivos (si algún objetivo requería un análisis más profundo). De este modo, el coordinador del grupo ha explicado al inicio el objetivo a tratar, se ha explicado cómo debe ser tratado en el aula, se ha buscado información y se han preparado materiales. Así ha sido realizado desde el primer al último objetivo. 

 

Nivel de interacción entre los participantes

Todos y cada uno de los participantes en este grupo de trabajo han colaborado de forma efusiva en cada una de las etapas. En las reuniones, al explicar la nueva metodología, los participantes han hecho preguntas y reflexionado sobre su efectividad. Así, cuando ha llegado el momento de la puesta en práctica y a medida que avanzaba el proyecto, los participantes se han visto obligados a adaptar la teoría a cada una de las necesidades de sus grupos e incluso alumnado. Este es precisamente otro de los objetivos de este GT, la atención a la diversidad.

 

Grado de aplicación en su contexto educativo

Las acciones llevadas a cabo en este grupo de trabajo han tenido un impacto directo en el aula. En el tiempo que ha transcurrido entre las distintas reuniones, se ha puesto en práctica la información expuesta en estas de un modo empírico. Es decir, en cada una de las reuniones, se ha expuesto un modo innovador de impartir conocimiento en lengua extranjera. Posteriormente, cada miembro del grupo de trabajo, lo ha puesto en práctica en al menos uno de sus grupos y ha anotado los resultados. Esta información recolectada mediante el método de ensayo-error, ha sido debatida en la siguiente reunión antes de abordar el siguiente objetivo del grupo de trabajo.

Efectos producidos en el aula tras la transferencia de lo aprendido

Al crear actividades adaptadas a las diferentes inteligencias del alumnado (auditoria, visual y kinestésica), las necesidades de estos quedan cubiertas. Así pues, al crear ejercicios de estos tres tipos en cada clase, el profesor puede asegurarse de que todo el alumnado ha progresado ya que ha tenido al menos una actividad que le ha ayudado a memorizar los contenidos.

Por otra parte, cuando el alumnado ha acabado las actividades propuestas, también se han atendido sus necesidades diferenciando. Así pues, los alumnos que han alcanzado los adjetivos con creces, se les ha dado actividades con más dificultad para que continúen progresando y no `se estaquen¿. Por otro lado, a los alumnos que necesitaban reforzar el contenido aprendido, se les ha dado actividades para reforzar.

Debido a estas dos características principalmente, los resultados de los diferentes grupos han aumentado y por lo tanto, podemos certificar que este grupo de trabajo ha tenido un impacto positivo en el aula.

 

Productos, evidencias de aprendizaje que se han adquirido

Los participantes en el grupo de trabajo han aprendido considerablemente ya que todo el contenido aprendido ha sido puesto en práctica consecutivamente. Las evidencias han sido mostradas en las reuniones posteriores, mediante el material creado y los resultados directos en el aula.

 

Destacar aspectos que hayan resultado interesantes

Lo más interesante de los resultados ha sido la mejora en los resultados del alumnado. Al hacer las clases más interesantes para el alumnado, mediante actividades lúdicas y temas adaptados a sus intereses y además, adaptar los contenidos a sus necesidades especiales, el progreso ha mejorado considerablemente.

 

Destacar aspectos susceptibles de mejora

Para mejorar, es necesario tener en cuenta que no todas las actividades van a funcionar con todos los grupos, si no que su efectividad puede variar.

Por lo tanto, al principio de curso es necesario identificar el tipo de inteligencia por el que se rige cada alumno y sus necesidades específicas, y adaptar las actividades llevadas a cabo al grupo e incluso al alumno si fuera necesario.