A pesar de la falta de presupuesto ya mencionada en la entrada anterior a esta, el grado de consecución de los objetivos es muy satisfactorio, ya que tenemos la suerte de contar con un grupo de personas que siempre está dispuesto a trabajar, así que lo que el curso pasado invertimos en catalogación, este año lo estamos invirtiendo en reorganización de fondos y mobiliarios, por ejemplo transfiriendo los contenidos de las bibliotecas de aula que no son usados, a la biblioteca de centro para ser mejor aprovechados.
La mayor satisfacción, de todos modos, ha sido la de, desde el grupo de trabajo de la biblioteca, y especialmente desde el departamento de lengua y literatura, organizar la feria de la escritura el mes pasado, en la que la colaboración por parte de casi todo el profesorado del centro ha sido tal que pocas veces, lamentablemente, piensa este coordinador que volverá a ver un ambiente de trabajo colectivo tan positivo.
Acabaremos haciendo mención especial de la escritora juvenil Silvia Suárez, que entretuvo en nuestro recinto de libros a los alumn@s de 2º de la ESO, y sobre todo al grupo de teatro leído El nombre es lo de menos, que proporcionó a segundo de bachillerato una visión novedosa sobre Miguel Hernández.
Y si yo fuera un alumno, seguramente diría que lo mejor de este año ha sido la obra de testro a la que llevamos a todo el centro el pasado mes de abril, Mucho Shakespeare.
Y aquí paz y después gloria.