Valoro muy positivamente el trabajo, realizado en las distintas aulas del centro , en relación a las técnicas de cohesión grupal. Siempre he pensado que estas técnicas son muy necesarias para sentirse parte de un grupo humano y no ser sólo compañeros y compañeras de clase. Reconocernos como personas que viven, sienten y conocer qué nos une y qué nos separa. Convencernos que no todos y todas somo iguales y que la diversidad empieza por uno mismo. El sentirse grupo es imprescindible para aprender juntos.
Escuchando y observando las distintas experiencias que están llevando a cabo las maestras y los maestros con nuestro alumnado, me doy cuenta de lo importante y fundamental que es aplicar las distintas técnicas que estamos conociendo y más aun, hacerlo de forma sistemática. Sólo así conseguiremos un verdadero trabajo cooperativo en las aulas.
Del mismo modo, pienso que como claustro debemos seguir avanzando juntos en la formación del aprendizaje cooperativo.