Como estamos viendo en cada una de las sesiones, la Educación Emocional es una parte esencial del aprendizaje desde los primeros años (Infantil), pasando por (Primaria) hasta llegar a (Secundaria). Si bien es cierto que en Secundaria el alumnado es más reacio a mostrar sus emociones y aunque debería ser más sencillo en un primer momento trabajar este ámbito con ellos, vemos como al realizar ciertas actividades cuesta que se abran y se expresen.
Desde mi materia que es la Música intento que a través de distintas obras musicales vayan expresando lo que sienten, jugando no solo con la expresión lingüística, sino también con la expresión corporal a través del movimiento, la expresión plástica, etc.

Como vamos desarrollando en cada una de las sesiones, vamos viendo las dificultades con las que nos encontramos en el aula para trabajar las emociones, intentando dar solución con los puntos de vista y aportaciones de las otras compañeras. Tenemos claro, que es esencial trabajar la parte emocional en la escuela y que está integrada en el currículo, por lo tanto, deberíamos desarrollarlas. Aunque el alumnado es reacio a expresar las mismas, cuanto más mayor es, consideramos importante ir trabajándolas desde INFANTIL, donde el alumnado las expresa sin dificultad, sobre todo las positivas, así como también trabajar la ira, el enfado, el miedo... para que el alumnado conforme va creciendo y cambiando de curso, no tenga dificultad en expresarlas y hablar de ellas.

Las estrategias para trabajar la Inteligencia Emocional, recurren a conceptos tales como autoconocimiento, autonomía, autoestima, comunicación, habilidades sociales, escucha, solución de conflictos, pensamiento positivo, entre otros.
Lo que se busca con el trabajo en Inteligencia Emocional es que las personas con discapacidad con dificultades emocionales puedan resolverlos en la medida de sus posibilidades, que aprendan a reconocer y a lidiar con sus limitaciones, para que ellas no terminen en frustración y en conductas disruptivas.
Es sabido que el trabajo en procedimientos relativos a la Inteligencia Emocional, han logrado una mayor tolerancia a la frustración, mayor participación en los asuntos que los conciernen, disminución de los estados depresivos, mayor aceptación social, mejoras importantes en su vida de relación, una visión más positiva de la vida entre otros.
Estos modelos de conducta se aprenden, por lo cual desde el centro educativo hay que estar al tanto de las estrategias necesarias para desarrollar la Inteligencia Emocional en el alumanado, por ejemplo mediante estrategias como el moldeamiento o la observación de modelos adecuados de conducta.
El desarrollo de la Inteligencia Emocional, si bien ha recibido críticas, a las cuales no le falta cierta razón como entre otras:basarse en propuestas voluntaristas, fundadas en conceptos confusos y simplistas e inconexo de formulaciones de diversas ramas de la Psicología sin fundamento científico.
Utilizado de manera sistemática si parece ser una herramienta a tener en cuenta para mejorar la calidad de la vida de relación de aquellas personas que, con o sin discapacidad, presentan problemas para intercomunicarse con otras y tener una buena autoimagen.